Según el secretario general de FECCOO, Francisco García, esta medida era “una necesidad” para solucionar el “vacío” en que la Lomce dejaba a los titulados en FP Básica que terminasen en 2016 y 2017, puesto que las reválidas de Secundaria no entrarán en vigor hasta 2018.

La Lomce prevé que entonces, los alumnos de FP Básica que quieran obtener su título de ESO superen la evaluación correspondiente, pero no aclaraba qué sucedería con los de años anteriores (la FP Básica empezó en 2014).

La norma aprobada por el gobierno establece que aquellos alumnos que aprueben los módulos instrumentales de FP Básica equiparables a los de la ESO obtendrán el título, siempre que el equipo docente los considere preparados.

El sindicato quiere que esta previsión se mantenga en el tiempo, pues “la dificultad añadida” que la Lomce aguarda para quienes quieran el título de ESO ha provocado un “descenso significativo” el número de matriculados en FP Básica respecto a los anteriores PCPI (Programas de Cualificación Profesional Inicial).

“Esto va a imposibilitar que los escolares con mayores problemas personales y sociales puedan continuar sus estudios, condenando su futuro personal y profesional y generando a su vez que se supriman numerosas plazas de profesorado”, concluyó.