Según informaron este miércoles a Servimedia fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno manchego, el fallecido era un bebé de dos meses y medio, natural de un pueblo de Cuenca y vacunado contra la enfermedad a los 60 días de su nacimiento. Murió en el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid 18 días después de la inmunización. Concretamente, el 20 de octubre.

Las mismas fuentes añadieron que a día de hoy hay otro niño ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Toledo también por tos ferina y, al igual que el anterior, oriundo de Cuenca.

El caso del fallecimiento del bebé de Castilla-La Mancha en el 12 de Octubre se suma así a los ocurridos en Sevilla y Málaga los pasados meses de septiembre y octubre, respectivamente.

La noticia del menor manchego muerto por tos ferina se conoce el mismo día en el que el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, ha anunciado que el Gobierno comprará un total de 60.000 vacunas de tos ferina y haya garantizado que el preparado llegará a "todo el mundo".