González es hijo del cantautor argentino ‘Jairo’ y uno de los ediles más jóvenes del Consistorio de la capital gala. Este concejal socialista, que habla perfectamente español, se encarga de un área de la política municipal referido a la vida nocturna de la ciudad.

En declaraciones a Servimedia, González se pronunció sobre la eventualidad de que España también bombardee a los terroristas islamistas en Siria, algo a lo que considera que el Gobierno de Mariano Rajoy debería contribuir, puesto que no se trata sólo de hacer gestos de apoyo y participar en actos de protesta.

A su juicio, “uno no puede ir a manifestarse a París por la libertad de prensa mano a mano con todos los jefes de Estado y luego decir que no se moja si luego hay que tomar otro tipo de medidas de orden militar”, en referencia a que Rajoy acudiera el pasado 11 de enero a la marcha que tuvo lugar en la capital francesa tras los atentados contra la revista ‘Charlie Hebdo’.

"NO DUDAR NI UN MINUTO"

“En estos casos”, aseguró este concejal, “no hay que dudar ni un solo minuto. La clave es la solidaridad europea, de hecho está previsto en el Tratado de la Comunidad Europea. Si un país es atacado los demás deben mostrar su total y plena solidaridad, que no es un solo una palabra sino tomar medidas comunes en contra del enemigo del estado europeo que ha sido atacado.”

Esto supone, según González, que “España tiene que responder, aunque entiendo las inquietudes que puede haber”, en referencia a las reticencias que el Gabinete de Rajoy puede tener a sumarse a los bombardeos al Daesh.

Asimismo, respecto a cómo puede integrarse mejor a los inmigrantes en Europa para que no acaben captados por el yihadismo, González señaló que “la comunidad musulmana, si es que se puede hablar de comunidad, está perfectamente integrada, tanto la primera como segunda y tercera generación”.

Este edil parisino destacó que se olvida el hecho de que “muchos de los terroristas que se van a entrenar a Siria son franceses no musulmanes”. De hecho, “el 30 por ciento de estos jóvenes son convertidos, no son ni de la primera ni de la segunda generación”.

Por tanto, González sostuvo que el problema está más relacionado con la “segregación social”, algo muy complejo que tiene que ver con “el paro en torno al 40 por ciento; con personas que han tenido una vida extremadamente difícil”. También incidió en la incidencia que tiene “el abandono durante años de muchos barrios a nivel urbanístico, de presencia de servicios públicos y de política pública; y con el abandono en la educación nacional, que necesita más medios”.