Un niño puede recibir cuatro veces más radiación que un adulto en la misma prueba si no se utiliza la técnica adecuada
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
La Sociedad Española de Radiología Médica (Seram) ha advertido de que si no se utiliza la técnica adecuada en una prueba radiológica un niño puede recibir cuatro veces más radiación que una persona adulta.
La advertencia de la Seram se produce coincidiendo con la conmemoración, este domingo, del Día Internacional de la Radiología, una jornada cuyo objetivo es dar a conocer la labor de los médicos radiólogos y las aportaciones del diagnóstico por imagen para el cuidado de la salud. El mismo día, además, se conmemora que hace 120 años que Wilhelm Conrad Röntgen descubrió la existencia de los rayos X.
Este año, la efeméride estará dedicada a la protección radiológica y a la radiología pediátrica. La doctora Gloria Gómez Mardones, responsable de Asuntos Profesionales de Seram y jefe de servicio del Hospital Niño Jesús de Madrid, señala que “partimos de la base de que el paciente pediátrico es diferente al paciente adulto y, por tanto, las pruebas de imagen médica deben adaptarse al niño; con la misma prueba un niño puede recibir hasta cuatro veces más radiación que un adulto si no se utiliza la técnica apropiada”.
Asimismo, destacó que “la valoración del riesgo a una exposición a la radiación no puede ser la misma para una persona de 70 años que para un niño de 7, que tiene más esperanza de vida, va a estar expuesto más veces a lo largo de su vida y tiene más riesgo de desarrollar un cáncer radioinducido que un adulto”.
Bajo el lema ‘Radiación, la justa’ se organizó el día 6 de noviembre una jornada divulgativa en la que pacientes y médicos expusieron sus experiencias y compartieron los últimos avances en el uso de las técnicas de imagen en pediatría.
En enero de 2014 entró en vigor una nueva legislación europea, por la que se establecen normas de seguridad básicas para la protección frente a los peligros derivados de la exposición a radiaciones ionizantes. Para trasponer a su legislación nacional esta nueva directiva, que considera la exposición médica de los niños como una práctica especial, los Estados miembros tienen de plazo hasta el 6 de febrero de 2018.
(SERVIMEDIA)
08 Nov 2015
CJC/gja