El bebé nació en la prefectura de Forecariah (suroeste de Guinea) y tuvo que ser trasladado a un centro de tratamiento de ébola en Conakry, la capital de país, donde se encuentra actualmente bajo tratamiento. Sus otros dos hermanos también fueron confirmados como positivos en la semana del 19 al 25 de octubre y están siendo tratados.

Esos tres casos confirmados en la penúltima semana generaron un gran número de contactos de alto riesgo en Forecariah, que continúan con el periodo de evaluación de 21 días para descartar que tienen la enfermedad.

Hasta el pasado domingo, había 382 contactos bajo seguimiento en Guinea (frente a los 364 de la semana anterior), de los cuales 141 son de alto riesgo, por lo que, según la OMS, “sigue existiendo un riesgo a corto plazo de nuevos casos entre contactos registrados y no identificados”.

Por su parte, Sierra Leona sumó su séptima semana consecutiva sin casos positivos por el virus del ébola y será declarada libre del brote el próximo sábado si no notifica ningún contagio nuevo.

La semana del 26 de octubre al 1 de noviembre fue la tercera con menos casos confirmados de ébola desde que el brote surgiera en febrero de 2014, sólo por detrás de las del 28 de septiembre al 4 de octubre y del 5 al 11 de octubre, que concluyeron sin nuevos contagios.

La incidencia del virus del ébola se mantiene en cinco o menos casos confirmados desde las últimas semanas, periodo en que la transmisión se ha limitado geográficamente a varias áreas pequeñas del oeste de Guinea y de Sierra Leona.

MÁS DE 11.000 MUERTES

Desde el inicio del brote, se han registrado un total de 28.571 casos confirmados, probables y sospechosos de enfermedad del virus del ébola en Guinea, Liberia y Sierra Leona hasta el pasado 1 de noviembre, con 11.299 muertos.

El número total de casos confirmados es similar en hombres y mujeres, en tanto que las personas de entre 15 a 44 años tienen cuatro veces más probabilidades de ser contagiados en Guinea y en Liberia, y el triple en Sierra Leona, en comparación con los menores de 15 años.

Desde el inicio del brote se detectaron 881 casos confirmados del virus del ébola en trabajadores de salud en Guinea, Liberia y Sierra Leona, de los cuales 513 acabaron con la muerte de la persona contagiada.