Según comunicó la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), este descenso del beneficio es consecuencia de la falta de extraordinarios, ya que en los nueve primeros meses de 2014 se contabilizaron plusvalías de 468 millones, derivadas en gran medida de la 'joint venture' del negocio de tarjetas.

En relación a la cuenta de resultados, el margen de intereses acumulado sumó 1.686 millones de euros, un 4,2% menos que en los nueve primeros meses de 2014.

Banco Popular subraya que se confirma la tendencia de los últimos trimestres por la que las dotaciones se reducen notablemente. Así, las provisiones se sitúan en 1.017 millones, un 44,1% menos que hace un año.

Por el lado de las comisiones, Banco Popular ingresó 445,8 millones por este concepto, un 12,9% menos con respecto a los 512,1 millones de los nueve primeros meses de 2014. No obstante, si se excluye el efecto que el año anterior tuvo la operación de compra del negocio minorista y de tarjetas a Citi, se mantienen al mismo nivel que en los trimestres anteriores.

En lo que va de año, el banco ha vendido un total de 1.588 millones de euros en inmuebles, cifra que supone un 60,7% más que en el mismo periodo de 2014. Destaca que el precio de venta está cerca del valor en libros, lo que muestra que las coberturas existentes son "adecuadas".

NUEVO CRÉDITO

Por su parte, la nueva contratación de crédito alcanzó los 17.198 millones de euros, lo que supone un avance del 17,2%. De la misma forma, el crédito a pymes y autónomos aumenta un 24% y el de particulares un 9%.

Como consecuencia de todo ello, el banco mejora su cuota de mercado en crédito en 21 puntos básicos desde el tercer trimestre de 2014, hasta llegar al 7,6%.

A cierre del tercer trimestre, el saldo de crédito a la clientela sumaba 109.497,1 millones de euros, un 1,5% menos sobre los 107.821,8 millones con respecto al año anterior.

La ratio de mora descendió por séptimo trimestre consecutivo y se sitúa en el 13,12%, 73 puntos básicos menos que en el tercer trimestre de 2014. Además, las entradas brutas en mora presentan una tendencia decreciente a lo largo del año y se reducen un 46% respecto al año anterior.