El texto que llegó a la Cámara Alta procedente del Congreso se enfrentaba este miércoles a los vetos de PP, CiU y Grupo Mixto, rechazados ya en la Comisión de Igualdad la semana pasada, y a un total de 88 enmiendas parciales de los distintos grupos parlamentarios, que, o se retiraron, o, como los vetos, no obtuvieron el respaldo suficiente para salir adelante.

De esta forma, la Cámara Alta dio luz verde a la nueva legislación sobre el aborto, que sustituye a la de 1985 y que entrará en vigor cuatro meses después de su publicación en el BOE.

La norma permitirá interrumpir libremente su embarazo a las chicas de 16 y 17 años, previa información, a al menos a uno de sus progenitores o tutores legales, aunque también hay excepciones a este requisito.

La nueva Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo modificará, concretamente, la Ley Orgánica 9/1985, en la que se recogen los supuestos en los que el aborto está ahora despenalizado del Código Penal.

El texto aprobado prevé también que los colegios impartan educación sexual y que los alumnos de medicina y enfermería estudien en sus carreras cómo se practica un aborto.

Del mismo modo, la norma reconoce el derecho a la objeción de conciencia a los profesionales sanitarios implicados directamente en la interrupción de un embarazo y prevé financiar en parte o en su totalidad los anticonceptivos de última generación.

EL DEBATE

Durante el debate, Carmen Dueñas, del PP, señaló que "es una reforma que nace sin consenso y que incumple los convenios internacionales ratificados por España".

La senadora popular pidió al Gobierno que "deje de hacer ya demagogia" con el asunto del aborto y abogó por la necesidad de que el Ejecutivo impulse un plan de apoyo a la mujer embarazada.

Por su parte, Monserrat Candini, de CiU, recordó que el debate de este miércoles no es "aborto sí o aborto no", sino la modificación de una legislación en la que ya tiene cabida la interrupción del embarazo. A su juicio, esta norma es más clarificadora" que la anterior, pues añade conocimiento y pedagogía a la existente.

En la misma línea que Candini se manifestó Assumpta Baig, de la Entesa Catalana, quien entendió que la nueva ley allana el camino a las generaciones de jóvenes, que podrán vivir una vida más feliz.

María del Mar Caballero, de UPN, intervino por el Grupo Mixto y afirmó que la norma aprobada no es "ni progresista ni moderna". Aunque reconoció que es bueno que haya una ley que incida en la educación sexual de los jóvenes, y añadió a continuación que "con eso sólo no sirve".

Miren Leanizbarrutia, de Senadores Nacionalistas, consideró que esta norma no aborda la libertad de conciencia de los profesionales sanitarios como debería hacerlo.

Por último, Patricia Hernández, del PSOE, calificó de "histórico" el día de hoy, porque, dijo, la ley que se aprueba permitirá que no se vuelva a señalar a las mujeres que abortan, que sí contarán con más seguridad que hasta ahora.

"Se acabó el dar la espalda a las mujeres, porque desde hoy España es un país más libre", señaló Hernández, quien criticó que el PP quiera establecer la edad penal en los 12 años y no permita a una chica de 17 abortar.