Gabilondo, que hizo estas declaraciones durante su visita al municipio de Navalcarnero para reunirse con el alcalde, dijo que “el Ayuntamiento no puede pagar la luz, el teléfono, el combustible, la calefacción, el agua, a los trabajadores, debido a la falta de liquidez, a lo que hay que sumar que los vecinos de este municipio se verán privados de servicios públicos tan esenciales como las escuelas infantiles, las residencias de ancianos y las Bescam (Brigadas Especiales de Seguridad de la Comunidad de Madrid), si no se garantiza una suficiencia económica”.

También habló de la situación de los barrios Dehesa y El Pinar, ya que “estos nuevos desarrollos carecen de infraestructuras y equipamiento de todo tipo” y de la ampliación de la línea de Cercanías C-5 Móstoles-Navalcarnero, para indicar que “la Comunidad de Madrid no puede abandonar a Navalcarnero ni condenar su futuro después de haber aprobado el plan”.

Asimismo, reivindicó un nuevo centro de salud para la localidad, ya que el que hay data de 1990 cuando la población de Navalcarnero era de 9.700 habitantes y ahora da un servicio a una población de más de 27.000 habitantes y vecinos de localidades limítrofes.

Gabilondo también visitó la obra de las Cuevas del Concejo, realizada por el anterior Gobierno, “una de las causas por las que el anterior alcalde está imputado con propuesta de apertura de juicio oral por parte del instructor, donde presuntamente se han derrochado más de 30 millones de euros sin procedimientos legales de contratación, desviando estos fondos de otros proyectos que fueron certificados en falso”.

A su juicio, “quizá deba intervenir la Cámara de Cuentas para investigar qué ha pasado en el Ayuntamiento de Navalcarnero durante los últimos años y esclarecer cómo se ha llegado a una deuda tan cuantiosa”.