En rueda de prensa, el secretario de Estado explicó que el Gobierno se ha marcado como objetivo una reducción para 2013 del 4% del gasto de personal, que cifró en 120.000 millones, y que aunque la revisión del acuerdo salarial "no es el instrumento principal", sí que "está sobre la mesa".

El Acuerdo de la Función Pública se firmó el pasado septiembre por el Gobierno y los sindicatos UGT, CCOO y CSI-CSIF, y establece una subida salarial del 0,3% para 2010 y mantener el poder adquisitivo de los empleados públicos a través de una cláusula de revisión salarial hasta el año 2012.

"Hay que revisar esos pactos para hacerlos coherentes" con el objetivo del 4%, indicó Ocaña, quien agregó que en todo caso no se verá afectada la subida del 0,3% de este ejercicio y que "nadie ha planteado ninguna disminución" del salario.

Así, Ocaña aseguró que "habrá que hacer los ajustes para que salga la cuenta que tiene que salir", y apuntó que la herramienta principal será "no cubrir las vacantes".

Por otra parte, aseguró que la reforma laboral que se haga tendrá que ser ambiciosa, y que ésta y reducir el déficit y reestructurar el sistema financiero son las prioridades del Gobierno.