En una breve rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, Rubalcaba explicó que el cierre de Guantánamo es un un objetivo con el que España y Europa están de acuerdo, porque su existencia era "incompatible" con los principios que defienden.

Por tanto, dio dos motivos para la acogida de ex presos de dicha cárcel: la solidaridad y el compromiso con el Gobierno de Barack Obama y la política propia de la UE.

El ministro señaló que el Gobierno ha puesto como requisito que no tengan causas penales pendientes en ningún país y que, al llegar, tendrán el "estatus legal que les permite la ley de extranjería", con "permiso de residencia y posibilidad de trabajar". Rubalcaba se comprometió a garantizar "lo más importante", la seguridad de los ciudadanos españoles.

A preguntas de los periodistas, añadió que, según un acuerdo de la UE, cada país tiene que informar al resto de qué presos va a acoger y limitar la movilidad de su huésped a sus propias fronteras, para evitar un uso indebido de las posibilidades del Espacio Schengen.

Interpelado también por los cooperantes españoles secuestrados en Mauritania por Al Qaeda, Rubalbaba abogó por "seguir trabajando con la reserva que exige el caso" y deseó: "Ojalá pronto podamos tener buenas noticias".