En el que quizás haya sido su discurso más largo y completo, Sánchez ha repasado su proyecto, político, sus medidas de alcanzar el Ejecutivo, contraponiendo la situación actual de España con el Gobierno del PP, ante más de 4.000 personas y decenas que seguían la intervención con pantallas fuera del pabellón deportivo Antonio Magariños, sede histórica del Estudiantes de baloncesto.

El líder del PSOE fue precedido por Ángel Gabilondo, portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, quién le advirtió que “ya ves la que te cae” después de que los presentes jalearan a Sánchez. “No estás solo, la gran familia socialista está contigo, pero también los ciudadanos que sin ser de un partido tienen un corazón social, por eso serás el próximo presidente de gobierno”, fueron las palabras de Gabilondo que animaron a Sánchez a subir al escenario para su intervención.

El líder del PSOE había entrado en el pabellón de a mano de su mujer, Begoña Gómez, y presentado “como el próximo presidente del Gobierno”. Estas palabras, y que el acto era en una cancha de baloncesto, llevó al público a gritar “este partido, lo vamos a ganar”, lo que provocó la risa del líder del PSOE.

Sánchez comenzó recordando que el Magariños es un sitio “especial” para él porque aquí dio sus “primeros pasos como jugador del baloncesto” y aprendió el “valor de formar parte de un gran equipo y de pertenecer a una gran familia” y de que el “equipo está por encima del individuo”. Ahora el pabellón deportivo es el sitio con el que PSOE ha marcado el inicio de la carrera electoral con la presentación de las candidaturas a Congreso y Senado.

PSOE INTEGRADOR

Tras una reivindicación de la historia del PSOE, justo en el día en el que hace 165 años nació Pablo Iglesias, fundador del partido, Sánchez dijo que “no ha habido una fuerza política capaz de integrar como el PSOE” y que es el “partido más importante de la historia de España”.

Ello le llevo a destacar que el “PSOE nunca puso límites, ninguna traba” y “en un tiempo en el que los dirigentes del PP dimiten o se avergüenzan del PP, nosotros abrimos nuestro partido a independientes porque siempre supimos que el PSOE es de la inmensa mayoría de los españoles”. “No ha habido una fuerza política capaz de unir e integrar a más personas en la vida y la historia común de España como lo ha hecho el PSOE. Ese es el patrimonio que nos avala”, destacó el líder socialista ante las críticas por su decisión de incorporar a independientes como la exdiputada de UPyD, Irene Lozano, o la exmilitar Zaida Cantera.

En esta línea, Sánchez, subrayó que “el PSOE ha venido siendo un enorme cauce de participación política de las personas de todos los territorios, de todas las condiciones sociales y económicas, socialistas de corazón con o sin carnet, con la única condición de abrazar los ideales comunes de libertad, igualdad, solidaridad y justicia social que propugnamos los socialistas”.

INMOVILISMO Y RUPTURISMO

Sánchez presentó al PSOE como la “alternativa” entre el “inmovilismo” del PP y el “rupturismo” de Podemos. “Hay quienes ven el futuro como una amenaza y siembran miedo, resignación, inmovilismo. Y hay quienes vemos el futuro como una oportunidad para progresar, para corregir aquellas cosas que hacemos mal y hacer aún mejor las que hacemos bien”. Sobre Ciudadanos no se percibió mención alguna.

CAMPAÑA SIN INSULTOS

Adelantó que en la campaña electoral, “nadie” espere a los socialistas entren en “la carrera de las descalificaciones ni en añadir más motivos al desencuentro y la fractura entre españoles” porque harán acciones en positivo, “de propuestas y no de amenazas, de esperanza y no de temores”.

“Afrontaremos la campaña con la confianza de quienes tienen un propósito relevante y generoso. Porque, a diferencia de otros, nuestro objetivo no es el de sumar escaños para estar en el poder sino para poder cambiar las cosas”.

Para el candidato del PSOE, España se enfrenta a dos “grandes encrucijadas”: la recuperación económica que sea justa y la reforma de la Constitución, sobre los que versó su discurso.

A su juicio, ante esta situación, “la derecha es inmovilista y dirá que esto es lo que hay y que cualquier cambio puede empeorarlo. No hacen más que engañar” y por otro lado, “los rupturistas. Los de las soluciones fáciles a los problemas complejos. Pero ni unos ni otros han traído nunca nada bueno a este país. Jamás. Solo frustración y desesperanza”, agregó el dirigente socialista.

Ante este escenario, Sánchez presentó a los socialistas como “reformistas” que van a proponer “reformas audaces y eficaces”, “radicales” que “resuelvan los problemas de raíz”.

“Digámoslo alto y claro. Las mejores páginas de la historia reciente de España se han escrito con puño y letra socialista, con reformas socialistas, tras triunfos socialistas. Y vamos a volver a hacerlo tras el 20 de diciembre.”

Esta frase una de las que provocó aplausos de los asistentes, así como casi todas aquellas que apelaban al orgullo socialista. En esta ocasión, el público, procedente de toda España, estaba muy entregado y animado.

CONSTITUCIÓN

En clave catalana, lanzó el mensaje de que “no vamos a modificar la Constitución bajo la amenaza de los secesionistas, pero tampoco vamos a renunciar a mejorar la Constitución porque nos amenacen los secesionistas”. “Nosotros no vamos a modificar la Constitución bajo la amenaza de los secesionistas. Pero tampoco vamos a renunciar a mejorarla porque nos amenazan los secesionistas.

A los rupturistas hay que ganarles, con la ley, con los votos y con la política. Se les gana con los argumentos del diálogo y la convivencia”, expresó.

“Que nadie se equivoque. Los socialistas estamos muy orgullosos de lo logrado a lo largo de los últimos 37 años. Hemos sido partícipes y protagonistas de su diseño y consecución” pero “tampoco aquí nos situamos junto a inmovilistas o rupturistas. Hay reformas pendientes y es preciso acometerlas, sin miedo, y sin ir más allá de lo que pueden procurar los grandes consensos sociales y políticos”.

En este sentido, dijo que “los socialistas estamos decididos a reformar la Constitución, y con la Constitución mejorar nuestras instituciones democráticas” y “no tiene por qué darnos temor”, pero “hagámoslo bien. Con sosiego, con diálogo, con voluntad de acuerdo y de consenso. Como lo hicimos en 1978”.

ECONOMÍA

A su juicio, “la derecha ha utilizado esta crisis para imponer su ideología, la más extrema”, de manera que “Rajoy ha dado lugar a la España más desigual que hace cuatro años”.

Por ello considera “imperdonable que la derecha se atreva a hacer sonar las trompetas de su propaganda cuando tantos españoles sufren paro, explotación y pobreza”.

Presentó que su propuesta será la de un “modelo económico distinto. Sólido y justo, sostenible medioambientalmente, moderno y con bienestar. Una economía para el beneficio de la mayoría”.

CORRUPCIÓN

Contrapuso que mientras “el PP sufre la corrupción de manera sistémica” y hasta “Génova (sede del PP) se resquebraja por la aluminosis de la corrupción”, él se presentó como un “político limpio que dirige un partido limpio y que aspira a un gobierno limpio”. Y advirtió que “quién se cruce en ese propósito, ya sabe lo que le espera: tarjeta roja directa”.

PATRIOTISMO

A su juicio, “ser patriota no consiste en afirmar la patria propia contra las demás” ni en “llenarse la boca hablando de patriotismo pero llevarse el patrimonio a paraísos fiscales”.

“La patria de los socialistas está en las aulas de los colegios públicos, en las habitaciones de los hospitales públicos, en los pisos de acogida para víctimas de la violencia de género, en las incubadoras de empresas, en los laboratorios donde trabajan jóvenes científicos, en las residencias públicas donde se atienden a nuestros mayores dependientes, en las clases donde se da la oportunidad que merecen las personas con discapacidad”.

Para Sánchez, “no hay nada más patriótico que ofrecer un futuro a millones de jóvenes y trabajadores desempleados. No hay nada más patriótico que acabar con la pobreza en España. No hay nada más patriótico que cerrar las fracturas que, por desidia, incapacidad o indolencia, ha abierto la derecha”, afirmó.

Señaló que el programa está plagado de “reformas en positivo” pero también de “unas cuantas derogaciones” y citó la reforma laboral, la LOMCE o la conocida como ‘ley mordaza’, pero sobre todo la norma del “mal gobernante que hace las cosas porque sí, porque quiero y porque puedo” en referencia a la mayoría absoluta utilizada por Rajoy en esta legislatura.

Para el líder del PSOE, “hoy más que nunca, el futuro de todos se dirime entre derecha e izquierda” y “entre sembrar la división y la discordia o unir de nuevo a España y a los españoles”.

Cerró su intervención “convencido” de que podrán ganar porque están “preparados para gobernar” y “abrir un nuevo tiempo político” porque “hay otra España posible”. Para el líder del PSOE, “si todas las elecciones son importantes, las elecciones del 20 de diciembre lo son realmente”. “Ánimo, a trabajar y a ganar el 20 de diciembre”, fueron las últimas palabras del líder socialista a un entregado auditorio que le jaleó en reiteradas ocasiones al grito de “presidente, presidente”.