Al acto también asistieron el ministro de Defensa, Pedro Morenés, el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (jemad), almirante general Fernando García Sánchez, el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (jeme), general Jaime Domínguez-Buj, la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, el presidente del Tribunal Militar Central, general Rafael Eduardo Matamoros, y los presidentes de los tribunales militares territoriales.

El acto, que tuvo lugar en la madrileña sede del Tribunal Militar central es el primero de esta naturaleza que se celebra, con el propósito de lograr una mayor integración de la justicia castrense en el Poder Judicial del Estado.

En ese sentido, Madrigal aseveró que 2015 ha sido un año de “profundas” reformas legislativas, con el Código Penal Militar, que fue publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE), como cabeza de lanza, al tiempo que aventuró que en 2016 se tendrá que llevar a cabo un “esfuerzo” de interpretación y adaptación a las nuevas normas.

Madrigal hizo una analogía entre lo civil y lo castrense al explicar lo que sintió cuando acudió el pasado lunes al desfile militar con motivo del Día de la Fiesta Nacional, especialmente cuando escuchó el himno ‘La muerte no es el final’, que los militares entonan cuando fallece un compañero en acto de servicio.

“Para conservar la libertad es preciso estar dispuesto a morir por ella”, sentenció.

Por último, Madrigal manifestó y aceptó como un desafío a alcanzar que el Ministerio Fiscal cada vez recibe atribuciones, a través de las distintas leyes aprobadas, que le confieren una vertiente social en ámbitos como la defensa de las personas con discapacidad y del medio ambiente.

Por su parte, Matamoros subrayó que las distintas reformas legislativas impulsadas por el Gobierno “sitúan a la justicia militar y refuerzan su independencia”, ajustada a los parámetros esgrimidos por el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Justicia de la UE y Naciones Unidas.

Al mismo tiempo, que advirtió que todavía queda mucho por hacer para lograr que ésta sea totalmente independiente del Ministerio de Defensa, sin menoscabo de mantener una “relación especial” con esta institución.