Al finalizar el interrogatorio el juez deberá decidir si decreta medidas cautelares, entre las que podría estar la prisión preventiva si aprecia que hay riesgo de destrucción de pruebas o de fuga. Fuentes de la Fiscalía aseguraron que no tiene previsto solicitar medidas cautelares.

Rato llegó a la sede los juzgados de la Plaza de Castilla madrileña a pie antes de las ocho de la mañana, cuando aún no habían llegado las cámaras de televisión. Tampoco se pudo captar su imagen a la salida de su casa, donde varias cámaras de televisión hacían guardia desde primera hora de la mañana.

Los que sí estaban presentes a su entrada eran un grupo de preferentistas entrados en años, que portando pancartas recibieron al exvicepresidente del Gobierno con gritos de "Rato, ratero, igual que tu padre, igual que tu abuelo".

El juez preguntará a Rato por el origen de los 6,5 millones de euros de la sociedad Kradonara, que el exvicepresidente controla a través de sociedades interpuestas y que recibió ese dinero desde Reino Unido, Gibraltar y Luxemburgo, si pagar impuestos.

Esta declaración se produce después de la negativa de Rato a explicarse en sede judicial el pasado mes de julio y tras interrogar el juez la pasada semana a su secretaria personal, Teresa Arellano, y a uno de sus supuestos testaferros, Alberto Portuondo.

El imputado fue detenido y puesto en libertad el pasado 16 de abril. En ese momento se negó a declarar ante las Fuerzas de Seguridad y posteriormente se acogió a su derecho a no responder al juez.

El caso tiene su origen en un informe de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) del Ministerio de Hacienda, que detectó movimientos sospechosos en las cuentas de Rato con intención de ocultar sus bienes al erario público.

NUEVAS DECLARACIONES

En las últimas semanas, al menos diez altos cargos de Bankia han declarado ante la Guardia Civil que Rato fue directo responsable de la adjudicación de varios contratos de publicidad del banco a Zenith Media y Publicis, en contra de la opinión de varios directivos.

Supuestamente, Rato se embolsó 835.000 euros en comisiones de estos contratos a través de una sociedad pantalla, Albinsa, cuyo administrador, Alberto Portuondo, es hasta ahora el único encarcelado de la causa. Ambas firmas se habrían adjudicado contratos por 40 millones de euros, de los que habrían salido las comisiones pagadas a Rato.

Buena parte del dinero cobrado por el político del PP a través de Kradonara se invirtió en un hotel de Berlín (Alemania) del que es propietario del 44% a través de la empresa germana Bagerpleta Gmbh.