Rafael de Mendizábal, nuevo presidente de la Comisión de Quejas del Periodismo
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El expresidente de la Audiencia Nacional Rafael de Mendizábal ha sido nombrado presidente de la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo, en sustitución de Manuel Núñez Encabo, que presentó su dimisión el pasado julio, según informó hoy la Federación de Asociaciones de Periodistas (FAPE).
Rafael de Mendizábal, hasta ahora vicepresidente de la comisión, ha sido magistrado del Tribunal Constitucional, presidente de Sala del Tribunal Supremo, juez 'ad hoc' del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y consejero del Tribunal de Cuentas.
También ha sido sido subsecretario de Educación y Ciencia y de Justicia, secretario General de promoción de Sahara y asesor del primer presidente y del Gobierno de la República de Guinea Ecuatorial. Hace 30 años fundó 'Actualidad Administrativa de La Ley', revista que sigue dirigiendo hasta el día de hoy.
Está en posesión de numerosos premios y reconocimientos como el de las Grandes Cruces de Isabel la Católica, San Raimundo de Peñafort, Alfonso X el Sabio y el Premio “Miguel Moya” 2010 de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) por su labor jurisprudencial y doctrinal en defensa de la libertad de expresión, desde 1971-1975 en la sala III del Tribunal Supremo, en numerosos congresos y seminarios y en el Tribunal Constitucional.
La Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo es un órgano independiente impulsado por la FAPE, integrado por personalidades procedentes del ámbito periodístico, jurídico, social y académico, que ha emitido más de cien resoluciones sobre el tratamiento informativo de los medios de comunicación.
La Comisión se constituye como órgano de autocontrol deontológico interno de la profesión periodística. Su objetivo es fomentar el periodismo ético desde la autorregulación independiente y responsable, a través de la mediación y el entendimiento. Se trata de una instancia arbitral entre la profesión y los ciudadanos que se sientan afectados por determinadas informaciones. Sin ningún poder sancionador, su autoridad moral viene otorgada por las organizaciones profesionales y los periodistas adheridos a ella y supone una alternativa complementaria a la regulación jurídica.
(SERVIMEDIA)
30 Sep 2015
JRN/gja