En conjunto, los afectados por ERE en los siete primeros meses del año ascendieron a 65.306 personas, lo que supone un 39,4%, menos que el año pasado, con bajadas del 38,3% en los despidos, del 59,3% en las reducciones de jornada y del 32,4% en las suspensiones temporales del empleo.

En términos absolutos, los expedientes más frecuentes fueron los de suspensión temporal del empleo, que afectaron a 41.135 trabajadores, mientras que 14.968 resultaron despedidos y 9.203 vieron reducida su jornada.

Por sectores, el mayor número de despidos se registró en los servicios con 9.141 (un 38,4% menos), seguido por la industria con 4.404 (-38%) y por la construcción con 1.187 (-45,2%). En último lugar aparece el sector agrario con 236, un 51,3% más.

En este sentido, un total de 3.963 empresas adoptaron medidas de regulación de empleo en los siete primeros meses del año, lo que supone un descenso del 48,7% sobre el mismo periodo del ejercicio anterior.

En total se registraron 4.884 ERE, lo que supone un descenso del 48,1% respecto a los siete primeros meses de 2014, de los que el 92,6% se resolvió con acuerdo.