Así lo recoge en un informe sobre ‘Los Presupuestos Generales del Estado para 2016’ presentado este viernes en rueda de prensa por el presidente del IEE, José Luis Feito.

De cara a 2016, se espera una “cierta moderación” en el crecimiento, con una previsión del 3%, lo que según el IEE “va a facilitar el cumplimiento de los objetivos de déficit”.

Para el Instituto de Estudios Económicos los Presupuestos de 2016 están fundamentados en un escenario macroeconómico “creíble” y con unas perspectivas de crecimiento de la producción y del empleo “sólidas”.

Por ello, considera que los PGE de 2016 deberían haber aspirado a acelerar el proceso de consolidación fiscal, de la misma manera que los objetivos de déficit se revisaron al alza cuando la economía española se debilitó más de lo previsto. En concreto, dijo que el objetivo debería ser entre medio punto y un punto menor al proyectado.

Según el IEE, los Presupuestos de 2016 son “poco ambiciosos” en lo que se refiere a la consolidación fiscal y “se echan en falta medidas de calado estructural” para aumentar la eficacia y sostenibilidad del gasto.

Feito señaló que los PGE de 2016 “no son óptimos” y “no son los que necesita la economía española”, para añadir que “son claramente mejorables”.

Además, cree que se producen algunos incrementos de gasto “electoralistas” y destaca que se ha olvidado el “replanteamiento” de algunos programas.

En materia fiscal, dice que sería “conveniente bascular” la estructura tributaria hacía una mayor imposición indirecta, en detrimento de la directa. En especial, apuesta por reducir cotizaciones sociales.

En concreto, sobre el IVA indicó que no cree que haya que subir los tipos de este impuestos pero “sí tiene que haber redistribuciones de la carga”, porque si se recauda por debajo de la medida europea “es que hay algún problema”.

“Estos Presupuestos están en el límite de la franja donde podríamos incluir lo que sería necesario para consolidar el proceso de nuestra economía”, subrayó el responsable del IEE, para añadir que “habrá que adoptar medidas en 2016 para que la política fiscal sea la necesaria para sacar a este país de la zona de peligro de alto riesgo”.

PRESUPUSTOS “ELECTORALISTAS”

Respecto a si éstas son unas cuentas públicas con carácter electoral, Feito apuntó que “todos los Presupuestos son electoralistas” porque “son la base de la política”. “Los políticos quieren conseguir votos y todas sus acciones van encaminadas” a ello, dijo, para agregar que “más cuando se anuncia una convocatoria de elecciones a la vez que se presenta” el proyecto.

Por otra parte, consideró acertado que se haya adelantado la aprobación de los Presupuestos porque tras las elecciones generales previstas para finales de año “no es descartable pensar que se pueda abrir un periodo de tensa incertidumbre”.

Feito explicó que “ganando un partido mayoritario u otro, puede haber dudas sobre la formación de un nuevo gobierno y el proceso puede ser mucho más largo” de lo habitual.

De esta manera, prevé un “periodo muy dilatado hasta la conformación de un nuevo gobierno”, al menos hasta junio, y “tampoco se puede descartar que fuera necesario convocar nuevas elecciones”.

Por ello, contar ya con un presupuesto elaborado permite contar con un marco “más o menos cierto para navegar sobre esas oleadas de incertidumbre”.