En un comunicado en su página web, Winterkorn admite estar "impactado" por los acontecimientos de los último días y se muestra asombrado de que esta situación haya podido producirse en el Grupo Volkswagen.

"Como CEO, acepto la responsabilidad por las irregularidades que se han producido en los motores diésel y por eso he pedido al Consejo del Grupo poner fin a mis funciones como CEO del Grupo Volkswagen", destacó.

Además, Winterkorn dijo que esta decisión la ha adoptado por "interés de la empresa", al tiempo que insistió en que él no ha actuado mal en ningún momento.

"Volkswagen necesita un nuevo comienzo, incluso en términos de personal. Con mi renuncia, yo estoy limpiando el camino para ese nuevo comienzo", argumentó.

El ya ex consejero delegado de la compañía afirma que siempre ha trabajado por servir a la compañía, "especialmente a los clientes y los empleados". "Volkswagen ha sido, es y siempre será mi vida", sentenció.

Para finalizar, se mostró convencido de que es necesario que continúe el proceso de clarificación y transparencia en relación con estos acontecimientos. "Este es el único camino para recuperar la confianza. Estoy convencido de que el Grupo Volkswagen y su equipo superará esta grave crisis", finalizó Winterkorn en su comunicado.