Sáenz de Santamaría se expresó en estos términos en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que compareció junto al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, en la primera jornada de la campaña de las elecciones del 27 de septiembre que coincide con la celebración de la Diada.

“Al principio de la democracia, el 11 de septiembre era una fiesta para todos los catalanes, después se convirtió en un acto reivindicativo de sólo una parte y, hoy, es un acto electoral de otros y sobre todo de Mas”, lamentó Sáenz de Santamaría.

La ‘número dos’ del Ejecutivo se refirió a una conversación suya previa con periodistas para apuntar que lo que pide es “legalidad” y “neutralidad” al presidente de la Generalitat de Cataluña. "Esto significa no utilizar lo que es de todos en beneficio de los interés electorales de sólo unos pocos”, dijo para criticar que “los recursos” para la manifestación “los pagan todos los catalanes para que hagan campaña solo unos pocos”.