EL 50 POR CIENTO DE LOS ADULTOS DE ALCOBENDAS SON ALCOHOLICOS EXCESIVOS, ALTOS O LIGEROS

ALCOBENDAS (MADRID)
SERVIMEDIA

Un estuio realizado por la Delegación de Salud del Ayuntamiento de Alcobendas indica que el 31,17 por ciento de los adultos residentes en esta localidad, son bebedores ligeros y un 19,16 por ciento figuran como alcohólicos moderados, altos y excesivos.

Según Alberto Luna, presidente de la Asociación Cultural de Alcohólicos de Madrid-Alcobendas, creada hace poco más de un mes, "el alcoholismo es uno de los mayores problemas sociales que existen en la zona norte, porque su aumento es constante".

El problea del alcoholismo, según el estudio y la experiencia de la asociación, se da en un 90 por ciento de los casos por ignorancia.

Según Luna, es imprescindible que la gente conozca el problema para poder controlarlo. Es habitual que el alcohólico no reconozca su enfermedad, por lo que a menudo, se opone a cualquier tipo de ayuda.

No existe un perfil que defina a un bebedor en la zona norte, porque, de acuerdo con estos datos, "todo aquel que bebe puede llegar a ser alcohólico, independientemente del rado de formación, ingresos, profesión o estado civil", indicó Luna.

Según el informe, la Asociación de Alcohólicos, las mujeres son el sector poblacional que más dificultades tiene para acudir a la integración y abandonar la bebida.

Las razones más importantes que impiden a este grupo su reinserción son la vergüenza de que familiares y amigos puedan conocer su condición de alcohólica, y su resistencia a reconocer que están enfermos.

Según las opiniones de los propios afectados, los bebedore caen en la dependencia sin apenas darse cuenta. El proceso es lento, pero irreversible y cuando el afectado se percata del peligro, es demasiado tarde.

La asociación establece tres fases en el recorrido hacia la dependencia: en la primera, se bebe para mejorar el ánimo y el alcohol es casi como "una medicina"; en la segunda, se empieza a beber en solitario y a escondidas, se acude al alcohol al menor problema y comienzan a darse algunas lagunas mentales.

Por último, en la tercera fase aparece ladependencia física y el enfermo se autodesprecia y sufre problemas con la familia, los amigos y el trabajo, lo que incide en un progresivo aislamiento y, por tanto, un mayor refugio en la bebida.

Esta asociación, que recoge a los afectados de toda la zona norte de Madrid, realiza reuniones de alcohólicos todos los miercoles.

Según el presidente de la asociación, la terapia de grupo es la más efectiva para el tratamiento de esta enfermedad.

La asociacioón colabora en la rehabilitación de esto enfermos con el Centro de Salud Mental del municipio de Alcobendas, en donde les dan un tratamiento médico y psicológico.

(SERVIMEDIA)
03 Ago 1991
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