La ONU eleva a casi 8.000 los muertos en la guerra del este de Ucrania

- Destaca que casi tres millones de personas están desprotegidas en Donetsk y Lugansk

MADRID
SERVIMEDIA

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, afirmó este martes que cerca de 8.000 personas han perdido la vida en el este de Ucrania desde que en abril de 2014 se iniciaran los enfrentamientos entre separatistas prorrusos y miembros de las fuerzas gubernamentales.

Así lo destacó al presentar el undécimo informe de la Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU en Ucrania, que abarca el periodo comprendido entre el 16 de mayo al 15 de agosto de este año, en el cual el número de víctimas civiles se duplicó en comparación con el trimestre anterior, con al menos 105 muertos y 308 heridos, por los 60 fallecidos y 102 lesionados entre el 16 de febrero y el 15 de mayo.

Zeid señaló que desde que comenzó el conflicto en el este de Ucrania, a mediados de abril de 2014, al menos 7.962 personas (entre ellos miembros de las fuerzas armadas ucranianas, de grupos armados prorrusos y civiles) han muerto y otros 17.811 han resultado heridos, aunque se trata de cifras “conservadoras” y que el número real de víctimas “podría ser mucho mayor”.

"El bombardeo de zonas residenciales en ambos lados de la línea de contacto ha llevado a un aumento alarmante en el número de víctimas civiles en los últimos tres meses. Aún queda mucho por hacer para proteger a los civiles y llegar a un cese completo de las hostilidades, de conformidad con el acuerdo de alto el fuego del pasado febrero”, dijo Zeid.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos comentó que la retirada de las armas pesadas en la línea de contacto, según lo previsto en los Acuerdos de Minsk de febrero, se ha mantenido parcialmente, puesto que se han producido enfrentamientos diarios e intercambios de fuego entre ambas partes en conflicto con morteros, cañones, obuses, tanques y cohetes.

EMPEORA LA SITUACIÓN DE LOS CIVILES

El informe resalta que la situación en el este de Ucrania durante el último trimestre continuó marcada por los enfrentamientos armados en algunas regiones de Donetsk y Lugansk, “alimentados por la presencia y la continua afluencia de combatientes extranjeros y armas sofisticadas y municiones procedentes de Rusia”.

Además, ve como “motivo de preocupación” que el Gobierno ruso siguiera enviando convoyes de camiones blancos con ayuda humanitaria “sin el pleno consentimiento o la inspección de Ucrania”, con lo que “su destino exacto y contenido no ha podido ser verificado”.

El documento apunta que los civiles que viven en la zona afectada por el conflicto, en particular cerca de la línea de contacto, se llevan la peor parte del conflicto armado y viven diariamente con incertidumbre y dificultades. “Su situación general está empeorando, incluso en términos de acceso a los alimentos y el agua, y esto es motivo de especial preocupación por la llegada del invierno”, añade.

El informe también documenta casos de asesinatos, secuestros, torturas y malos tratos, violencia sexual, trabajo forzado, peticiones de rescate y extorsión en los territorios controlados por las autoproclamadas 'República Popular de Donetsk' y 'República Popular de Lugansk'.

"Se estima que tres millones de personas siguen viviendo en los territorios bajo control de la ‘República Popular de Donetsk' y la 'República Popular de Lugansk' sin protección de las violaciones y los abusos de derechos humanos cometidos por grupos armados y sus partidarios", señala.

(SERVIMEDIA)
08 Sep 2015
MGR/pai