Jaime Atienza, director de Campañas y Estudios de Oxfam Intermón, señaló que “atender a los 15.000 refugiados que debe acoger España sólo supondría el 0,05 por ciento de los Presupuestos Generales del Estado de 2016”.

Según la organización, en los últimos 15 años, unas 30.000 personas han perdido la vida en el Mediterráneo. Se estima que durante 2015 llegarán a Europa alrededor de 340.000 personas, y la Agencia Europea para la Gestión de las Fronteras estima que el 80% de esas personas son susceptibles de obtener el derecho de asilo.

Añade que 60 millones de personas se han visto forzadas a huir sus hogares, la cifra más alta desde la Segunda Guerra Mundial y que la mayoría de las personas que migran buscan una vida sin miedo y sin pobreza.

La ONG considera, por ello, que el Gobierno de España “debe incrementar de forma inmediata una partida extraordinaria de 40 millones de euros para lo que queda de 2015, y que en los Presupuestos Generales del Estado de 2016 destine al menos 100 millones de euros a ese fin, frente a los 22 millones de euros actuales que han convertido a la Agencia Española de Cooperación Internacional en una ONG de tamaño mediano en este ámbito. Esos recursos deben destinarse a atender la necesidades básicas inmediatas de las personas que sufren conflictos y desastres naturales, además de incrementar su respuesta a la crisis siria, que hasta el momento sólo alcanza el 4% de lo que debería ser la aportación del Gobierno para ofrecer una cuota justa”.

En lo que respecta al derecho de asilo, Oxfam Intermón hace suya la propuesta '#UErfanos' de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, que propone medidas efectivas para evitar de forma inmediata que quienes huyen se vean abocados a arriesgar sus vidas y ponerse en manos de traficantes de personas, ampliando las posibilidades de solicitar asilo a embajadas y consulados, entre otras medidas urgentes.

La organización concluye que “más allá de la necesaria asistencia a las personas forzadas a huir de sus países, es imprescindible actuar sobre las causas de la huida de estas personas”, y añade que “España, como actual miembro del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, debería liderar propuestas que contribuyan a buscar salida a los conflictos".