En un comunicado, el sindicato aprovechó el inicio del nuevo curso escolar para reclamar “estabilidad”, consciente de que la temporada arranca plagada de citas electorales.

Por eso, solicitó que cualquier cambio que se introduzca en los próximos meses en el sistema educativo cuente con consenso y perdure en el tiempo, con independencia de quien gobierne.

FSIE recordó que tras las elecciones autonómicas de mayo, los nuevos Gobiernos anunciaron la paralización de la Lomce, a cuya derogación también se han comprometido todos los partidos de la oposición si en las próximas elecciones generales llegan al poder.

Por todo ello, FSIE reclamó a responsables autonómicos y nacionales evitar “la desorientación entre el profesorado y la existencia de situaciones contradictorias y diferencias territoriales que resultarían incomprensibles para los profesionales, las familias y los alumnos”.

Resulta “imprescindible” que a lo largo de este curso se aborde en el marco de la Conferencia Sectorial de Educación “un serio y profundo debate sobre el sistema educativo”, apuntó, a fin de dirimir diferencias y alcanzar acuerdos que permitan construir “el necesario Pacto Educativo que la sociedad, y especialmente la comunidad educativa, reclaman desde hace años”.

Finalmente, FSIE pidió al Ministerio de Educación la convocatoria de la Mesa Sectorial de la Enseñanza Concertada para abordar la situación del sector.

A su juicio, la aplicación de la LOMCE, su repercusión en el empleo y los Presupuestos Generales del Estado para 2016, “que discriminan a 130.000 docentes de la enseñanza concertada”, deben ser bien explicados.