Frontex es una agencia europea para la gestión de la cooperación operativa en las Fronteras Exteriores de los Estados miembros de la Unión Europea y tienen como objetivo mejorar la gestión integrada de las fronteras exteriores de los Estados miembros de la Unión.

Arias-Fernández, en declaraciones a la COPE, recordó que la misión militar que persigue la destrucción de los diferentes señores de la guerra, está paralizada porque necesita el visto bueno de la ONU pero esta organización no se pronuncia.

Gil Arias Fernández ha reconocido también que tanto Hungría como Grecia, dos de los países que reciben más desplazados, no pueden hacer frente a tal avalancha y necesitan recibir ayuda humanitaria.

Además reconoció que es muy escéptico ante la solución del problema porque desde Europa no se puede hacer mucho más, la clave está en los países de origen, Siria, Irak o Afganistán y apuesta por “operaciones militares”.

En su opinión, “hay pilares en la UE que se están poniendo en duda como la solidaridad, el riesgo de que se suspenda la libre circulación de personas. Lamenta que “hay determinadas acciones que indican que algunos valores de la UE empiezan a tambalearse”.

El director adjunto de Frontex concluyó que en julio más de 100.000 personas han llegado a la UE, una cifra record que se incrementará en agosto. También han aumentado las peticiones de asilo, una cifra que ni siquiera se superó durante la guerra de los Balcanes.