La prueba consistirá en la utilización por más de un centenar de hogares de este municipio catalán de módems 3G HSPA y bases wifi durante medio año, periodo en el que se medirá el grado de satisfacción de los clientes con este servicio móvil, según explicó el director de Estrategia de Vodafone España, Javier Jaquotot, en rueda de prensa.

Asimismo, se estudiará las velocidades reales de subida y descarga de datos por parte de los ciudadanos para conocer si es posible esta sustitución del ADSL fijo por la banda ancha móvil.

Este proyecto se centra en los municipios de tamaño medio, como Sant Quirze del Vallés que cuenta con una población de entre 18.000 y 20.000 habitantes.

Para la prueba se desplegará una red HSPA de 14,4 megas, que ofrece una velocidad real máxima de 10,8 megas. Además, este tipo de conexiones ofrece una rápida instalación, una mayor facilidad de uso y una velocidad de subida de datos a Internet más alta que la red fija.

La prueba se desarrollará con la infraestructura que la compañía ya tiene en la localidad catalana, adaptando las antenas existentes con nuevo software que permita la conexión 3G HSPA.

Jaquotot apuntó que esta prueba piloto que desarrollará la compañía es diferente al resto, ya que supone la “sustitución” de una tecnología por otra.

Por su parte, la alcaldesa del municipio, Montserrat Mundi, destacó la “satisfacción inmensa” de la localidad por haber sido escogida por Vodafone para la prueba piloto.