La Guardia Civil, que investiga el presunto delito de blanqueo de capitales en las diligencias seguidas contra el exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato, llevó al detenido al juzgado de guardia, el de Instrucción número diez, que decretó su ingreso en prisión y que a continuación le puso a disposición del juez que sigue el caso.

Este jueves, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado conducirán al empresario a Plaza de Castilla para que el juez, en su caso, ratifique la orden de prisión. Entretanto, y a la espera de que la Audiencia Nacional decida sobre la inhibición planteada por el juzgado número 31, continúa la investigación del procedimiento. La causa respecto a la detención del empresario mejicano está bajo secreto de sumario.

La Fiscalía de Madrid en funciones de guardia, en coordinación con la Fiscalía Anticorrupción encargada del asunto, solicitó tras la dentención la prisión comunicada y sin fianza y la retirada del pasaporte para el responsable de la empresa Albisa S.L, en el marco de las diligencias seguidas por el juzgado en el `caso Rato´.

La decisión del fiscal se apoya en el riesgo de destrucción de pruebas y en el elevado riesgo de fuga. Según informó la Fiscalía, en el momento de la detención, el responsable de Albisa S.L. se encontraba en el aeropuerto de Madrid y tenía previsto viajar a Méjico, lugar donde reside habitualmente.

Estos extremos fueron recogidos en el auto dictado por el Juzgado de Instrucción de guardia que acordó las medidas cautelares solicitadas.

La intervención fue posible gracias a la labor de investigación desempeñada por la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) de la Agencia Tributaria y la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.