En rueda de prensa tras reunirse con el ministro de Hacienda, los líderes sindicales lamentaron que el Ejecutivo se “conforme” con una reducción del paro de 600.000 personas durante el próximo año y aseguraron que las cuentas planteadas por el Gobierno "no tienen vocación de resolver o atenuar las necesidades de las personas, ni tienen contenido para asentar la recuperación económica".

En este sentido, Toxo resumió el proyecto de presupuestos que les ha presentado Montoro en tres pilares, que son los de "aprovechar los márgenes para reducir impuestos, el rigor en el gasto y la mejora de los salarios por el efecto de la bajada del IRPF".

Además, criticó que el Ejecutivo presente los presupuestos del próximo año “a las puertas de unas elecciones generales”, algo que considera que “no es lo más adecuado”. “Hacienda está elaborando el programa electoral del PP”, aseveró el líder de CCOO.

En su opinión, las cuentas del próximo ejercicio deberían centrarse en “el empleo y la pobreza”, ya que considera que “el Estado ha contraído una deuda social tremenda que debería empezar a saldar con la inmensa mayoría de la población”.

Para ello, los representantes sindicales apuestan por mejorar los ingresos del Estado y de la Seguridad Social. En el caso de la Seguridad Social, Toxo advirtió que está “sometida a una tensión de la que se va a resentir muy seriamente”, por lo que demandó un “incremento de las cotizaciones empresariales y un plan para una mejora sostenida de los ingresos”.

REDUCCIÓN DEL DÉFICIT

En una línea similar, Méndez criticó que el proyecto de presupuestos elaborado por el Gobierno “está orientado a la reducción del déficit de manera prácticamente exclusiva” y no tiene “el contenido necesario para asentar la recuperación económica".

También alertó de que estas cuentas no van a permitir al país “aumentar su autonomía para asentar la recuperación económica” y aseguró que ésta “seguirá muy vinculada a la coyuntura internacional, que se está deteriorando”.

Asimismo, los responsables sindicales sostuvieron que estos presupuestos deberían incluir una lucha decidida contra la pobreza, para lo que insistieron en su propuesta de crear una prestación de renta mínima para garantizar los ingresos de los familias en paro, a la que se destinaría el 1% del PIB, cerca de 10.000 millones de euros.