Duran presentó en este encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum, la conferencia del secretario general de UDC, Ramón Espadaler, del que espera que sea también candidato a la Presidencia de la Generalitat en esas elecciones.

Aseguró que nadie quería esas elecciones, excepto Ciutadans y ERC pensando en sus "legítimas aspiraciones electorales", y especialmente UDC "no las quería" entre otras cosas porque considera que las energías tienen que estar centradas en superar la crisis económica y en paliar sus consecuencias sociales.

La fecha elegida, añadió, es consecuencia de que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, se ha visto "arrastrado" por las entidades independentistas, con las que ha negociado el momento y la hoja de ruta a aplicar.

"Nos han metido en un lío", dijo, "y tenemos que salir de él", y en su opinión no puede ser saltándose la ley ni pretendiendo que sean los tribunales los que resuelvan un problema político.

Ante un nutrido grupo de dirigentes políticos, entre ellos el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, Duran subrayó que UDC es la única formación "habilitada" en Cataluña, en el resto de España y en la Unión Europea "para ser útil en este momento extraordinario". "Quien tenga confianza en mí", aseguró, "puede tenerla sin ninguna duda" en Espadaler.

Expresó su "absoluta confianza" en él, y subrayó, entre sus cualidades, su experiencia parlamentaria y de gestión combinada con dosis de renovación, su sentido institucional, su capacidad de "dar la cara" en un momento en que eso es necesario, y el ser "radical en la moderación", motivos por los que "vale su peso en oro". En un momento en el que "está de moda la simplificación", elogió de Espadaler ser un hombre "reflexivo".

Dejó claro que él no se va, sino que estará "a su disposición", y precisó que no es pretencioso cuando asegura que Cataluña, España y la Unión Europea necesitan que a su formación "le vaya bien" en esas elecciones.

"El mal llamado problema catalán necesita una solución" porque, de lo contrario, "se enquistará, y eso tiene malas consecuencias" en esos tres ámbitos: el catalán, el español y el europeo.