Así indicaron a Servimedia fuentes socialistas que han trabajado en esta medida que Sánchez verbalizó en Mérida como promesa electoral si logra la Presidencia del Gobierno tras las elecciones del próximo otoño.

Esta renta mínima, cifrada 426 euros al mes más complementos familiares, está pensada para las 730.000 familias que actualmente están sin ingresos y que lleva al PSOE a calcular 1.847.000 beneficiarios.

Dichas fuentes indicaron que se trata de una medida muy parecida a la que ya hay en otras comunidades autónomas, como en Asturias, gobernada por el socialista Javier Fernández. Estará vinculada a un programa personalizado de inserción laboral, la activación laboral y la formación, y su encaje legal será igual que una renta no contributiva y el subsidio por desempleo.

El desarrollo de esta medida deberá hacerse mediante una proposición de ley una vez que, de lograr el respaldo electoral, el candidato socialista llegase al Palacio de la Moncloa.

El coste anual de la medida, según el PSOE, asciende a 3.856 millones de euros que serán sufragados a cargo de los Presupuestos Generales del Estado.