Según informó hoy la caja, las provisiones se incrementaron un 51,5%, hasta alcanzar los 1.141 millones de euros, en el marco de una estrategia de "máxima prudencia" que permita gestionar de manera más holgada la morosidad en 2010. La morosidad de la entidad cerró 2009 en el 4,59%, medio punto más que un año antes, cuando se encontraba en el 4,05%.

Con un volumen de negocio de 178.354 millones de euros, los activos totales aumentaron en el ejercicio 2009 un 4,51%, hasta los 111.459 millones.

Mientras, el crédito bajó un 3,07%, por lo que el saldo crediticio en 2009 se situó en 82.952 millones, de los que más de dos terceras partes tienen garantías reales. Además, más del 75% de las operaciones nuevas de crédito se destinaron a la financiación de empresas y pymes.

Por su parte, los recursos gestionados crecieron un 8,4%, hasta los 95.403 millones de euros. Los clientes de la entidad aumentaron un 225.000.

Bancaja redujo en 2009 su número de empleados y de oficinas. En concreto, el descenso fue del 0,55% en el caso de la plantilla y del 0,82% en oficinas.