Esto representa una disminución del 5,1% del personal docente e investigador (PDI) y del 4,9% del personal de administración y servicios (PAS).

Para CCOO, este descenso “es resultado de las limitaciones de la tasa de reposición de trabajadores y trabajadoras impuesta por el Gobierno del Partido Popular, que imposibilita que las bajas por jubilación y otras eventualidades sean cubiertas por nuevo personal funcionario”.

Ello obliga a los campus públicos a realizar contratos temporales y precarios para cubrir la docencia de quienes abandonan la Universidad, apuntó la central.

Dentro del colectivo docente, la eliminación de puestos de trabajo fue más acusada entre el PDI funcionario (un 5,9%) que en el PDI contratado, que cayó un 4%.

Sin embargo, durante 2014 (último año estudiado) se produjo un crecimiento del 9,1% de la plantilla en este último apartado. Este aumento “esconde la sustitución de empleo fijo y de calidad por trabajo precario”, afirma CCOO, pues se reemplaza a profesorado funcionario por docentes con contratos laborales que en la mayoría de los casos son temporales y a tiempo parcial.

El sindicato llama también la atención sobre las grandes diferencias existentes entre universidades históricas con plantillas muy consolidadas, que llegan a destruir hasta un 9,9% de profesorado funcionario, como la Complutense de Madrid o la Universidad de Barcelona, y otras de más reciente creación que no pierden efectivos o incluso crecen ligeramente, como la Pompeu Fabra o la Rey Juan Carlos.

En relación al personal de administración y servicios, la reducción de plantillas se ha producido fundamentalmente entre el PAS contratado laboral, que ha perdido un 10,4% de sus integrantes entre enero de 2012 y enero de 2015. La destrucción de empleo del personal funcionario fue en cambio solo del 1%.

A juicio de CCOO, la “tan cacareada recuperación económica no ha llegado a la Universidad pública, que sigue destruyendo empleo a un ritmo preocupante”.

Por eso, exige al Gobierno que suprima las limitaciones a la contratación en las universidades públicas, recupere el empleo perdido en estos últimos años, acabe con la creciente precariedad que se está instalando en el sistema universitario y haga posible la incorporación de jóvenes a las plantillas.