Al término de la votación, Pastor dijo que hoy es "un día de satisfacción, un día grande para el autogobierno vasco", en el que se ha "cerrado un capítulo". Reiteró que el blindaje del concierto no supone ningún "privilegio", sino que sólo pretende "equiparar" el rango de las normas fiscales vascas a las del resto de comunidades. En este sentido, aseguró que las limítrofes "no se van a ver agraviadas". "Al menos, no es nuestra intención", aseguró.

El portavoz del PSE desmintió la insinuación realizada antes del pleno por el presidente del PNV, Íñigo Urkullu, de que no todo el PSOE está de acuerdo con el blindaje, afirmando que sus "dudas no tienen sustento en la realidad" y que sólo pueden proceder del "desconocimiento" o de la"mala fe".

Finalmente, Pastor dijo comprender la actitud de los dos senadores del PP vasco, que se ausentaron de la votación del blindaje para no contradecir las directrices del partido a nivel nacional ni la posición de los populares en Euskadi. A juicio del portavoz socialista, la ausencia supone un "toque de atención a sus compañeros del resto de España", que no han mostrado "la misma sensibilidad" hacia la especificidad vasca.