Rajoy hizo estas declaraciones durante un acto en el Palacio de la Moncloa en el que entregó a título póstumo la Medalla de la Orden del Mérito Constitucional a la familia de la fundadora de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ana María Vidal-Abarca

Con la presencia de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y los ministros del Interior y de Sanidad, Jorge Fernández Díaz y Alfonso Alonso, Rajoy alabó la figura de Ana María Vidal-Abarca y la puso como ejemplo del "compromiso" con la democracia de todas las víctimas del terrorismo.

"Seguimos necesitando vuestro compromiso, inspiración y ejemplo. Os queremos presentes en la vida pública", dijo. "Es imprescindible vuestro testimonio para fijar el relato de una España constitucional capaz de derrotar con la ley y la razón al terrorismo".

Rajoy esgrimió que el ejemplo protagonizado por Vidal-Abarca es la constatación del "sueño de una nación en concordia", porque durante décadas fue "un referente de libertad y un testigo de esperanza para millones de españoles".

Por eso, dijo rendirle "homenaje sentido y solemne" con la concesión a título póstumo de la Medalla de la Orden del Mérito Constitucional, que encumbra su "patriotismo excepcional en la España contemporánea" a pesar de las "circunstancias humanamente muy difíciles" en las que vivió tras el asesinato de su marido.

"Contribuyó a mostrar al mundo el terror y la injusticia radical de ETA y la bondad de todos los que con la Constitución en la mano han luchado contra ETA", dijo al entregar a su familia "una medalla ganada a pulso y con plena justicia". "Con ella reconocemos el papel inspirador que para tantos millones de españoles tuvo su trabajo frente al chantaje".

REPROCHES DE LA FAMILIA

La hija de Ana María Vidal-Abarca, Ana Velasco, recibió la medalla de manos del presidente del Gobierno y tomó la palabra para explicar que en los últimos tiempos su madre estaba "dolida por las excarcelaciones tras las ridículas condenas" de los terroristas de ETA y "escéptica y triste" por la llegada a las instituciones de partidos políticos como Bildu, afines al entorno de la banda.

Velasco, que se emocionó leyendo unas líneas escritas por su madre, subrayó que a ella le preocupaba que todavía existen unos 400 crímenes de ETA sin resolver y que temía que las víctimas del terrorismo cayeran en el "silencio" y en el "olvido colectivo".

Recalcó que siempre tuvo un "compromiso constante y leal hacia España, la Justicia y la libertad" y, tras manifestar las dudas de su madre sobre la forma de los políticos de acabar con ETA, reivindicó la vigencia de "las normas del Estado de Derecho que deben regir el comportamiento de todos pase lo que pase".

Por su parte, la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, María del Mar Blanco Garrido, definió a Vidal-Abarca como una "mujer valiente y generosa" y una "gran luchadora" que sufrió el "zarpazo" del terrorismo de ETA en la década de los 80.

Señaló que, tras el asesinato de su marido, tuvo que abandonar el País Vasco con "una mochila cargada de soledad y dificultades, pero también una mochila cargada de valentía" que le llevó a crear la Asociación Víctimas del Terrorismo.

Blanco Garrido recordó que también puso en marcha la Fundación Víctimas del Terrorismo y estuvo al frente de ella hasta 2005, donde puso voz "a quienes más habían perdido por el terror" y demostró un "coraje, entereza, pasión por la libertad, justicia y ejemplo por la superación constante".