En un comunicado, Toxo subraya que el principio de acuerdo alcanzado entre las dos partes, aunque contiene algunas medidas de ajuste, “propone un horizonte de acción política y económica, y un nuevo calendario para el pago de la deuda más favorable para el pueblo griego”.

Para el líder de CCOO, “una ruptura definitiva de las negociaciones, no sólo hubiera sido una muy mala noticia para el pueblo griego, sino que conduciría a un callejón sin salida a la Unión Europea y al euro, y de manera singular a los países del sur de Europa, España en primer lugar”.

Por otro lado, denunció la "intolerable estrategia de presión y chantaje de algunas autoridades políticas y financieras, ignorando no solo la democracia de las urnas en Grecia, sino poniendo en manos de los ‘lobbies' económicos la iniciativa de la negociación y devaluando aún más la capacidad democrática de las instituciones comunitarias".