Así lo adelantó este jueves el jefe de Climatología de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Antonio Mestre, en una rueda de prensa celebrada en Madrid, donde varios responsables de este organismo presentaron la predicción estacional para el verano, el resumen climático de la primavera y la evolución de las precipitaciones desde el inicio del año hidrológico (el pasado 1 de octubre).

Mestre indicó que lo más probable es que la temperatura en el trimestre veraniego entre julio y septiembre alcance valores superiores a la media en la península y Baleares con respecto al periodo de referencia entre 1981 y 2010, lo que se traduce en “como mucho un grado más” de lo habitual. Los termómetros de Canarias marcarán temperaturas normales para esta estación del año.

En cuanto a las precipitaciones, Mestre indicó que no se aprecian variaciones importantes en ninguna zona de España respecto a la media entre 1981 y 2010.

El jefe de Predicción de la Aemet, Ángel Alcázar, señaló que el verano llegará este domingo con “nubosidad abundante, sobre todo en la mitad norte” de la península, donde podrían producirse tormentas, mientras que las temperaturas continuarán la senda de ascenso de estos días.

RÉCORDS DE TEMPERATURA EN PRIMAVERA

Por otro lado, la portavoz de la Aemet, Ana Casals, hizo un resumen climático del trimestre primaveral entre marzo y mayo, e indicó que esta estación fue la cuarta más calurosa en el conjunto de España desde 1971 y la octava más lluviosa desde 1947.

Casals señaló que la primavera ha tenido “carácter muy cálido”, con una temperatura media en España de 15,1ºC, lo que supone 1,5ºC por encima de lo normal registrado en el periodo de referencia entre 1981 y 2010, y la cuarta más calurosa desde 1971, sólo por detrás de 1997, 2006 y 2011.

Cuatro estaciones principales de la Aemet batieron récords históricos de temperatura media en primavera, concretamente en Talavera la Real (17,7ºC), Jaén (17,5ºC), Cuenca (13,9ºC) y Huesca-Pirineros (14,9ºC), en tanto que otras cuatro igualaron el valor medio más elevado de sus series históricas: Madrid-Retiro (15,7ºC), Huelva-Ronda Este (18,2ºC), Morón de la Frontera (18ºC) y Málaga-aeropuerto (18,3ºC).

El trimestre fue cálido en Baleares y Canarias, y muy cálido en el resto de España, siendo incluso extremadamente cálido en diversas áreas de Madrid, Cataluña y el este de Andalucía. Las temperaturas medias se situaron, en general, entre 1 y 2ºC por encima de los valores normales, aunque superaron en 2ºC la anomalía cálida en puntos del interior de la mitad sur peninsular y en los Pirineos. Sólo en las regiones cantábricas, Baleares y Canarias los promedios fueron inferiores a 1ºC.

Al avanzar la primavera, la anomalía cálida se fue incrementando de forma progresiva, de manera que si en marzo la temperatura media superó en sólo 0,3ºC el valor medio, en abril fue de 1,7ºC y en mayo, alcanzó los 2,4ºC.

Casals indicó que el hecho más destacado de la primavera fue “el extraordinario episodio de temperaturas elevadas” que se registró entre los días 13 y 14 de mayo, que afectó muy especialmente a la Comunidad Valenciana y a Canarias. De hecho, un total de 31 estaciones principales superaron la temperatura máxima absoluta de la primavera en toda la serie histórica.

La temperatura más elevada de la primavera entre los observatorios principales fueron los 42,6ºC alcanzados el 13 de mayo en Lanzarote-aeropuerto y al día siguiente en Valencia-aeropuerto. En ambos casos, se superó el récord histórico de mayo en 6 y 6,6ºC, respectivamente.

En cambio, las mínimas del trimestre primaveral se produjeron, como es habitual, en marzo. Los valores más bajos fueron -7,6ºC el 5 de marzo en el Puerto de Navacerrada (Madrid) y -7,1ºC en Molina de Aragón (Guadalajara) el 16 de ese mismo mes.

PRIMAVERA MUY SECA

En cuanto a las precipitaciones, la primavera fue muy seca en general, sobre todo debido al carácter extraordinariamente seco de mayo. Las lluvias alcanzaron o superaron los valores medios sólo en áreas del tercio oriental y la precipitación media sobre España fue de 122 litros por metro cuadrado, lo que supone un 30% menos de la media del trimestre. Además, los observatorios de Tenerife-sur y La Coruña-aeropuerto registraron la primavera más seca desde que hay datos.

Las precipitaciones de la primavera sólo superaron los valores normales en una franja que se extiende por el tercio este peninsular, desde el extremo sur de Navarra hasta el este de Andalucía, abarcando el centro y sur de Aragón, las provincias de Castellón y Valencia, y diversas zonas del este de Castilla-La mancha y de los extremos oriental y meridional de Andalucía. Las cantidades totalizadas superaron el doble de lo normal en el norte de Castellón, debido al temporal de lluvias registrado en la tercera decena de marzo.

PRIMERA QUINCENA DE JUNIO Y AÑO HIDROLÓGICO

Por otra parte, Casals aportó algunos datos sobre la climatología en los 15 primeros días de junio. Así, destacó que las temperaturas estuvieron por encima de los normales en toda España, con una anomalía positiva media ligeramente superior a 1ºC, si bien fue próxima a los 2ºC en el centro peninsular.

En esta primera quincena de junio, las precipitaciones fueron, en general, “claramente superiores a las normales”, debido a las abundantes tormentas registradas en los últimos días, especialmente en el interior peninsular.

Por último, Mestre subrayó que el actual año hidrológico (desde el pasado 1 de octubre) está siendo, en general, “ligeramente más seco de lo normal”, debido principalmente a las escasísimas precipitaciones de mayo.

Hasta el pasado 15 de junio, el valor medio nacional de las precipitaciones acumuladas desde que comenzó el año hidrológico se cifra en torno a los 490 litros por metro cuadrado, lo que representa un 10% menos que el valor normal correspondiente al periodo de referencia entre 1981 y 2010 (543 litros).