En este sentido, precisó que los sectores con menor financiación hasta el momento son la nutrición, que ha recibido un 2% de lo necesario; la seguridad (6%), la agricultura (8%) y la educación y la recuperación temprana (18%).

No obstante, a pesar de "los países de todo el mundo han respondido con generosidad" a este llamamiento humanitario realizado el pasado 15 de enero, tres días después del seísmo, la OCHA señaló que "se necesitan más fondos".

Por ello, el enviado especial de la ONU para Haití, Bill Clinton, hará un nuevo llamamiento el próximo 17 de febrero, con el fin de cubrir toda la ayuda humanitaria para los supervivientes del terremoto hasta el final de 2010.

El director de la OCHA en Nueva York (Estados Unidos), Rashid Khalikov, aseguró que "un millón de haitianos han perdido sus hogares y dos millones de personas necesitan asistencia alimentaria", además de que "cientos de miles de personas aún necesitan refugio, atención médica, agua y demás ayuda humanitaria básica".

A este respecto, señaló que el llamamiento de Clinton será más elevado porque tendrá en cuenta el costo de asegurar que las personas sin hogar por el terremoto "no experimentarán más miseria en la temporada de lluvias y huracanes a finales de año"

La OCHA explicó que, “en general, las necesidades enormes de los afectados continúan creciendo. La comunidad humanitaria en Haití, integrada por más de 600 organizaciones de socorro, está trabajando día y noche para ayudar a los desplazados y tratando de llegar a las familias de acogida en la prestación de socorro y servicios básicos como alimentos, agua, saneamiento, vivienda y la atención médica”.

Hasta el pasado 4 de febrero, más de 1,6 millones de personas habían recibido asistencia alimentaria y casi 800.000 contaban con agua potable diaria.

Además, 24.000 familias habían recibido material de refugio de emergencia, pero la OCHA resaltó que “las necesidades siguen siendo muy grandes”.