Así se pronunció Margallo en una entrevista en RNE, recogida por Servimedia, acerca de la cuál puede ser la reacción de las autoridades de Venezuela ante la llegada de González al país caribeño para actuar como asesor técnico de la defensa de los opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma.

En ese sentido, Margallo defendió que “los españoles tienen libertad para viajar por todo el mundo. Que las autoridades venezolanas le dejen entrar o no es cosa suya. No puedo decirle que no vaya o que haga algo que creo que tiene que hacer: defender a los opositores encarcelados”, al tiempo que manifestó que “yo no me enfadaría si un venezolano viniera a prestar asistencia técnica a un español. No veo el motivo del enfado”.

Del mismo modo, el jefe de la diplomacia afirmó que “este tipo de situaciones nos preocupa, más en una nación que forma parte de la comunidad iberoamericana y en la que hay 200.000 españoles”.

Preguntado por el estado actual de las relaciones entre España y Venezuela, Margallo dijo que “esto va y viene. Va por días. Nuestro embajador está en Caracas. Ha vuelto. El suyo, que estuvo ausente durante un tiempo, está aquí”, al tiempo que confirmó que mantuvo conversaciones con el vicepresidente de Brasil, Michel Temer, y con su homólogo ecuatoriano, Rafael Patiño, para aliviar las tensiones entre ambos países.

“A mí tener malas relaciones con un país no me gusta. No estoy para crear líos, sino para arreglarlos. Cuando ha habido insultos notorios se ha llamado a consultas al embajador. Cuando te insultan hay que hablar fuerte”.