Ese año, a pesar de los grandes acontecimientos de la Expo y las Olimpiadas, los españoles viajaron menos que en ejercicios anteriores. Un 55,5 por ciento no relizó ningún viaje, sobre todo por razones económicas, pero también por motivos familiares, de inseguridad laboral o por tener que trabajar o estudiar.

La Secretaría General de Turismo explica este descenso por "el momento histórico que atraviesa la sociedad española, fuertemente condicionada por la aureola que ha rodeado los acontecimientos de 1992 y las circunstancias actuales de la economía española y mundial".

La crisis se tradujo no sólo en un menor número de viajeros, sino también en un descnso del gasto realizado por cada uno de ellos, al situarse la media en 61.300 pesetas, frente a 75.480 dos años antes, en 1990.

La principal razón alegada por quienes viajan en vacaciones es descansar (39,9 por ciento), cambiar de ambiente (33 por cien) ver a la familia o amistades (31 por cien) y conocer sitios nuevos (16,1 por cien).

Los destinos preferidos son la costa o playa, al que se apuntan un 53,7 por ciento de los encuestados, por delante de los pueblos pequeños (19,1 por cien) y la monaña (15,8).

La Expo fue visitada por el 5 por cien de los que viajaron y los Juegos de Barcelona por el 0,2 por cien. A la Expo acudieron 3.830.000 españoles, que realizaron un gasto medio de 41.000 pesetas "per capita".

Entre las localidades favoritas destacan Sevilla (4,6 por ciento), Benidorm (3,3), Mallorca (2,5), Torrevieja (1,7), Madrid (1,3) Torremolinos (1,3), Tenerife (1,1), Barcelona (1), Santander (0,9), Málaga (0,9), Marbella (0,9) y Tarragona (0,9).

Los que prefirieron salir al xtranjero eligieron mayoritariamente como destino Francia (17,7 por cien), Portugal (12), Reino Unido (9,2), Italia (8), Estados Unidos (4,7), México (4,1) y Marruecos (3,6). Su gasto medio fue de 134.600 pesetas.

El transporte más utilizado para viajar fue el coche, con un 61,9 por ciento, seguido del autocar y el avión, ambos con un 14,5 por cien; el tren, con un 6,9; y el barco, con un 1,4.

Las princiales actividades realizadas durante las vacaciones son tomar el sol y bañarse (54,7 por ciento, visitar museos y monumentos (31,9 por ciento), hacer fotografías o filmar películas (31,4) y pasear (23,9).

MEDIO AMBIENTE

Por otra parte, la encuesta de la Secretaría General de Turismo detecta una creciente preocupación por las condiciones medio ambientales, hasta el punto de que sólo un 44,5 por cien de los encuestados no detectó ningún problema de este tipo en el lugar elegido para pasar las vacaciones.

Las quejas más frecuentes se refieren a la urbanización excesiva (17,7 por ciento), elruido (17,2), las basuras (15,5) y la suciedad en las aguas de baño (14,6). Un 5,7 por cien aseguraron que no repetirán destino turístico por alguno de estos motivos.

La culpa recae, a su juicio, sobre los municipios y los propios turistas. A este respecto, un 53,2 por cien están dispuestos a prescindir en ocasiones del coche y un 43,3 por cien, a aceptar precios más altos a cambio de servicios que no dañen el medio ambiente.