A través de un comunicado, las entidades informaron sobre este modelo de empleo en el que están trabajando y que, en su opinión, mejoraría la cualificación de las personas con discapacidad y apuntaría hacia un sistema flexible, vinculado al sistema educativo, orientado a la evaluación continua de las circunstancias de la persona y con mecanismos de tránsito o retorno entre servicios.

“El objetivo del modelo es aumentar las oportunidades de empleo y la promoción profesional de las personas con discapacidad en el mercado laboral y garantizar su acceso a programas de orientación, servicios de intermediación y formación profesional”, destacaron las organizaciones.

Este modelo apostaría por el diseño de itinerarios por perfil; la cualificación y profesionalización de las personas con discapacidad a través de sistemas mixtos de formación y empleo dirigidos a la obtención de un certificado de profesionalidad; la ‘flexiseguridad’ del itinerario de acuerdo a las necesidades y características de la persona con discapacidad; un sistema mixto donde confluyan las políticas sociales con las de empleo; el apoyo a la adaptación y mantenimiento del puesto de trabajo sin limitación temporal; y el derecho de retorno.