Vidal-Quadras aseguró a Servimedia que la ley de veguerías es "otro de los frutos envenenados del Estatuto de Cataluña" y que la nueva división administrativa "lo único que hará es complicar más la Administración" y "aumentar la burocracia", porque "aparte de eso la provincia subsiste, entre otras razones porque para cambiar los límites provinciales hace falta una ley del Congreso".

"Entonces", prosiguió, " tendremos que, desde la óptica central, Cataluña tiene cuatro provincias que además son las circunscripciones electorales. Por otro lado, desde la perspectiva autonómica, las siete veguerías. Eso es una confusión, un lío, un caos", a lo que se añadiría que todo sería "mucho más caro, burocratizado y confuso". Por todo ello, sentenció: "Es una superposición demencial".

A la pregunta de si CiU va a admitir la nueva división, con una veguería que comprende Barcelona con su conurbación de electorado tradicionalmente socialista, el ex presidente del PP catalán recordó que "Convergencia, con Pujol, ya eliminó el área metropolitana, que concentraba la mayor parte de la población de Cataluña y la parte más industrial y más rica, y era un contrapoder de la Generalitat".

En ese sentido, indicó que "Convergencia ya ha dicho que considera que esto no era una urgencia ni mucho menos", de lo que deduce que "no ha mostrado ningún entusiasmo por esta división", tanto por ser una iniciativa del Tripartito como por que electoralmente le interesa más la división actual.