“Voy perdiendo ese miedo”, declaró a Servimedia García Montero, quien admitió que “lo tuve cuando vi que Podemos, la fuerza con la que habíamos empezado a dialogar para tener espacios de convergencia, más que dialogar lo que quería era fagocitarnos”.

Además, añadió, “se nos tendieron trampas; cuando acudíamos a dialogar se nos decía que no era posible una coalición con siglas y que teníamos que renunciar a nuestra propia identidad en las candidaturas municipales”.

García Montero indicó que “dialogar es saber ponerse en el lugar del otro, pero no dejar al otro sin lugar”, y destacó que “vimos que lo que nos estaban pidiendo era renunciar a nuestro espacio y creímos que eso era peligroso y un empobrecimiento de una propuesta de transformación”.

Aseguró que IU es una formación que “no se avergüenza de la palabra izquierda” y que quiere “participar en la convergencia, pero sin borrar la memoria de unas siglas que han hecho mucho por esta democracia”.

Asimismo, señaló que aceptó con “honor” ser candidato y reconoció que llegó a esta responsabilidad por el “lío” que hay en la coalición: “Hay mucho lío, por eso pensaron en hacerme esa propuesta, pero soy consciente de que si no hubiera dificultades, ni ellos hubieran acudido a mí, ni yo me hubiera comprometido”.

García Montero explicó que es militante de base de IU desde 1986 y dedicado al activismo cultural. A su juicio, “IU vuelve a ser un foco de atracción y vuelve a situar en sus espacios a gente de mucho prestigio, como Sabina, Pedro Almodóvar o Miguel Ríos”.

Por otro lado, informó de que el próximo 25 de abril se celebrará un concierto de música de apoyo a su candidatura electoral con los anteriormente citados, más Rosalen, Viceversa o Soledad Morente. También recitarán Almudena Grandes, Rosana Torres o Benjamín Prado.