El texto, al que ha tenido acceso Servimedia, ha sido registrado en el Congreso de los Diputados a través del Grupo ERC-IU-ICV, ha sido presentado para su debate en la Comisión Constitucional y en el Pleno de la Cámara Baja.

La proposición ha sido presentada después de que el multimillonario Juan Ignacio Balada diese en herencia parte de sus posesiones a la Casa Real. “Estas donaciones evidencian una disfunción: se realizan por la figura institucional del Rey, pero van en beneficio únicamente de su patrimonio personal”, dice el texto.

“Dado que la actividad institucional de la Casa Real se financia a través de los Presupuestos Generales del Estado, es necesario vincular las aportaciones a favor de la figura institucional y la financiación de la misma”, añade la proposición.

Por eso, la proposición insta al Gobierno a realizar las modificaciones oportunas para que tales donaciones se inscriban a favor del Estado.

MOVILIZACIÓN EN FACEBOOK Y OTRAS CAMPAÑAS

En Facebook, nada más conocerse la noticia se creó el grupo “Para que los Príncipes donen a Haití la herencia millonaria del menorquín”, al que se han adherido ya 58.194 personas.

La portavoz de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) en el Parlamento catalán, Laia Ortiz, también hizo una petición en ese mismo sentido, hace unas semanas.

A juicio de la dirigente de ICV, "sería del todo incomprensible ver al Rey poner la crisis económica en primer lugar en su discurso y lucrarse personalmente con una herencia multimillonaria”.

Para ICV, el caso de la herencia de Balada, que ha dejado su inmnensa fortuna a la Familia Real, "demuestra la necesidad de conocer las cuentas de la Casa Real” y de habilitar mecanismos para que ésta sea transparente.

Precisamente, el Partido Comunista de España (PCE) inició a finales de enero la campaña de recogida de firmas “¿En qué gastas mi dinero?”, por la transparencia de las cuentas de la Casa Real.

El objetivo de la campaña es elevar a la Comisión de Peticiones del Congreso de los Diputados una propuesta para que las cuentas de la Casa Real tengan control público y puedan ser conocidas por todos los españoles.