En todo caso, en su discurso ante la Junta General de Accionistas del banco, quiso dejar claro que "esto no excluye que estudiaremos alguna inversión puntual", siempre que añada valor para el accionista.

Botín subrayó que el "punto de partida de Banco Santander es hoy excelente" y que está "bien preparado" para afrontar los distintos "desafíos" que existen.

Así, por ejemplo, se refirió a los "retos de gran calado" que tiene por delante el sector financiero, con las reformas en la regulación.

En este sentido, apuntó que el grupo opera en un entorno en que las exigencias regulatorias siguen aumentando, para destacar que es "importante cerrar cuanto antes las cuestiones que están por definir y centrarnos en su implementación".

Además, destacó que será "fundamental" hacer una valoración "continua y global" del nuevo marco regulatorio para asegurar que se alcanza un buen equilibrio entre estabilidad financiera y crecimiento económico.

Por su parte, el consejero delegado del banco, José Antonio Álvarez, dijo que aunque existen aún "incertidumbres" en la industria bancaria, "creemos que hemos pasado lo peor de la crisis y entramos en una nueva fase en que la prioridad es mejorar la rentabilidad del negocio".

Álvarez explicó que el grupo está en una "buena dinámica" de crecimiento de volúmenes de negocio y resultados, y agregó que cuenta con "holgadas" posiciones de liquidez y capital para crecer en un entorno de mayor actividad en los mercados principales del grupo.

CRÉDITO EN ESPAÑA

Respecto a la evolución del crédito del grupo en España, la presidenta del Santander expuso que en los dos primeros meses del ejercicio los nuevos préstamos a empresas y pymes han subido un 3,9% respecto a 2014, la producción hipotecaria lo ha hecho un 26% y los créditos al consumo, un 35%.

En esta línea, señaló que el objetivo es, como se hizo en 2014, que el crédito del banco en España crezca más que el mercado.

DIVIDENDO

En cuanto a la política de retribución al accionista, explicó que el objetivo es que el dividendo evolución de acuerdo con los beneficios del grupo, distribuyendo ente el 30% y el 40% del beneficio recurrente.

La entidad volverá a la fórmula tradicional del pago en efectivo. Todavía en el reparto con cargo a 2015 se mantendrá el "Dividendo Elección" sólo en el pago de noviembre por importe de 0,05 euros.

Durante 2015, los accionistas del Santander percibirán un total de 0,4 euros por acción, de los que 0,3 son con cargo a 2014 y 0,1 al presente año, lo que supone una rentabilidad por título de alrededor del 6%.

Botín defendió que la nueva política de dividendos es "buena" para el banco y también para todos los accionistas.

La presidenta del Santander tuvo un recuerdo para su padre y antecesor en el cargo, Emilio Botín, fallecido el pasado mes de septiembre, de quien destacó su "visión estratégica y liderazgo".

Además, defendió los cambios realizados en la cúpula del banco, entre los que se encuentra el del consejero delegado, que "han tenido como objetivo contar con las personas mejor preparadas y más cualificadas".