Sanjuanbenito intervino en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno de este jueves para hacer balance de los datos de uso del servicio, que a su juicio consolidan la bici como un medio de transporte alternativo para uso cotidiano, y para anunciar esta primera ampliación que estaba ya contemplada en el contrato con la empresa adjudicataria, la cual correrá por tanto con el coste de la misma.

El concejal expuso que, desde su puesta en funcionamiento en mayo pasado, Bicimad ha incorporado 31.000 abonados, 3.000 ciudadanos han utilizado la tarjeta ocasional y se han realizado 4.000 usos diarios con 17 minutos de media, para totalizar más de un millón de viajes.

Según detalló, el 65% de los usuarios tienen entre 26 y 45 años, que los días de diario utilizan la bici de día en más de un 80% de los casos pero los fines de semana el uso nocturno supera el 30%, y la duración media del trayecto en bici se extiende hasta los 21 minutos. La estación más utilizada es la de Sol, con 200 recogidas de bicicletas diarias, seguida de las de la plaza de la Cebada y Santa María de la Cabeza. En conjunto, se calcula que el uso de la bici se ha incrementado en un 50% respecto a 2011.

A finales de abril, prosiguió Sanjuanbenito, se inaugurarán cuatro nuevas estaciones, 1.008 nuevos anclajes y se pondrán a disposición de los madrileños otras 409 bicicletas eléctricas. Al término de 2015, estarán en servicio 165 estaciones y 2.028 bicicletas. Además, se va a ampliar la zona de extensión de Bicimad al norte por el paseo de la Castellana y al sur hasta conectar con el paseo de la Florida, añadiéndose 62 kilómetros de carriles bici, hasta los 440. Entre este año y el que viene, se invertirán cinco millones de euros en la renovación del anillo verde ciclista.

A preguntas de los periodistas, Sanjuanbenito no entró a facilitar datos de la rentabilidad económica que supone este servicio para la empresa concesionaria, recalcando el beneficio social que supone para la ciudad, aseguró que se están poniendo multas por exceso de velocidad en los carriles bici, aunque no tenía los datos a mano y dijo no tener constancia, pese a las encuestas, de que la limpieza preocupe hoy más a los madrileños que hace un año, si bien concedió que, si es así, habrá que “mejorar”.