Así se pronunció su portavoz, Luis Eduardo Manresa, en declaraciones a Servimedia, acerca de las amenazas de expropiación que habrían recibido empresas españolas afincadas en Venezuela por parte de Maduro, en caso de no acabar la “campaña de desprestigio” que atribuye a medios de comunicación españoles hacia el país caribeño.

A ello se suman las últimas declaraciones del mandatario venezolano en las que denunciaba un supuesto eje Madrid-Bogotá-Miami de “conspiración permanente” que promueve, bajo el auspicio de la oposición venezolana, que se publiquen mentiras e informaciones falsas.

Manresa aseguró que las amenazas de Maduro no son más que un “mero chantaje que llevan aplicando desde hace muchos años”. Por ello, recomendó al Gobierno “mantener un posición de firmeza”, ya que el problema de fondo es que la “petrochequera ha acallado a la comunidad internacional”, lo que ha traído como consecuencia “17 años de este régimen en el poder violando derechos humanos, destruyendo el país, torturando y metiendo presa a la disidencia”.

Por último, reclamó que se le hiciera pasar un “susto” a Maduro para hacerle ver que no se va a aceptar “este nuevo chantaje”, acudiendo, si fuera necesario, a los organismos internacionales.