“Las comunidades de vecinos del Estado español, con consumos anuales de gas natural mayores de 50.000 kilovatios hora al año (kWh/año), -prácticamente todas las comunidades de vecinos con calefacción centralizada- estamos sufriendo una presión insoportable sobre nuestros presupuestos anuales para gastos de calefacción”, afirma la iniciativa, que atribuye esta situación a que se les aplican tarifas de grandes consumidores industriales.

En cambio, los hogares con consumos inferiores a 50.000 kWh por año, “prácticamente todos ellos usuarios sin calefacción de gas o con calefacción individual”, están regulados por tarifas “bastante más económicas, para consumidores domésticos”, con la Tarifa de Último Recurso (TUR).

Según detalla la iniciativa, estas tarifas son entre tres y cuatro veces más económicas que las de grandes consumidores industriales y tienen los incrementos máximos trimestrales “limitados por decreto del Gobierno central, que impide crecimientos desorbitados”.

“No se entiende este agravio comparativo entre dos grupos de consumidores en los que la única diferencia substancial, radica en cómo producen el calor para mejorar la habitabilidad de sus viviendas: de forma colectiva y centralizada o individual”, lamenta la iniciativa.

De no revertirse esta situación, el impulsor de la recogida de firmas advierte de que “muchas” comunidades de vecinos, “aquellas que aglutinan entre su población a las personas de rentas más bajas y edad más avanzada”, tendrán que prescindir del servicio de calefacción.

“Los promotores de esta petición estamos convencidos de que, desde las administraciones públicas no se va a permitir que se mantenga por más tiempo este tipo de agravios comparativos entre colectivos similares, cuyas únicas diferencias son el tamaño de su caldera de calefacción y el elevado desequilibrio actual entre los costes derivados de este servicio, que estamos soportando unos y otros”, asevera el texto.

Finalmente, la iniciativa anima a los ciudadanos a seguir firmando esta petición, ya que es “un paso más” para eliminar “agravios comparativos entre consumidores”.