Unos 300.000 niños son reclutados como soldados en 18 países
- Hoy se celebra el Día Internacional contra la Utilización de Niños Soldado
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Alrededor de 300.000 niños son utilizados en guerras o conflictos armados en 18 países, siete de los cuales utilizan a las niñas como víctimas al adiestrarlas para la guerra o emplearlas como esclavas sexuales o para matrimonios forzados.
Con motivo del Día Internacional contra la Utilización de Niños Soldado, que se celebra hoy, 12 de febrero, Misiones Salesianas denunció que la cifra aproximada de 300.000 menores “no disminuye en tanto que los conflictos en el mundo tampoco lo hacen”.
La portavoz de Misiones Salesianas, Ana Muñoz, reclamó a gobiernos y organismos internacionales protección especial para los menores en conflictos.
Esta congregación trabaja con menores soldado en Sierra Leona, República Democrática del Congo y Colmbia,
Por su parte, las organizaciones Alboán, Amnistía Internacional, Entreculturas, Fundación El Compromiso y Save the Children señalaron que los 18 países que emplean a niños como soldados son Afganistán, Colombia, Costa de Marfil, Filipinas, Iraq, Líbano, Mali, Myanmar, Nigeria, Pakistán, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Siria, Somalia, Sudán, Sudán del Sur, Tailandia y Yemen.
Estas cinco ONG destacaron que el reclutamiento de menores soldado es una práctica prohibida por el Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la participación de menores en conflictos armados.
51 GRUPOS ARMADOS
Aun así, existen 51 grupos armados documentados por Naciones Unidas que reclutan a menores, como Boko Haram (en Nigeria), Seleka y Antibalaka (República Centroafricana), Al Shabaab (Somalia), Estado Islámico (Oriente Medio) y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (Colombia).
“No todos los casos son de menores reclutados a la fuerza. Existen factores que pueden influir para que un niño o una niña se una a un grupo armado de manera ‘voluntaria’. En algunos países, unirse a un grupo armado se ve como una salida a situaciones de pobreza extrema, con limitadas oportunidades de empleo y situaciones de inseguridad, en las que la milicia puede proporcionar protección, comida y una familia sustituta”, indicaron las ONG.
Es el caso de Pierre, un soldado de 17 años de República Democrática del Congo que se unió dos veces a un grupo armado: “No tenía nada que hacer. Me prometieron comida, trabajo y una carrera militar”, explica.
Finalmente, Pierre pudo abandonar los grupos para asistir a clases de formación profesional en uno de los campamentos de desplazados de Mweso, en el Estado de Kivu del Norte. “Puedo aprender carpintería y tal vez vender algunas cosas”, dice esperanzado.
NIÑAS
Por otro lado, las ONG señalaron que Naciones Unidas detectó en 2013 que al menos siete de los 18 países que reclutan menores también utilizan a niñas (Colombia, Filipinas, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Somalia, Sudán y Tailandia).
Aunque fundamentalmente son usadas como esclavas sexuales y en matrimonios forzados, las niñas también son adiestradas para la guerra, llevar armas y participar activamente en los conflictos armados.
“Esta igualación en las armas y la utilización de la violencia no supone, sin embargo, estar libres de abusos y violencia sexual, ni de estigma y desvaloración por ser niñas, así como de posible rechazo en el contexto familiar en el momento de la reintegración”, añaden.
Cristal tenía 16 años cuando se unió al grupo armado de Seleka, en la República Centroafricana, después de que se llevaran detenido y maltrataran a su hermano mayor. Su función era la de supervisar los vehículos y recaudar dinero en un puesto de control. “Eran los hombres armados quienes dominaban aquí y yo decidí unirme a ellos para defender mi familia. Si no me unía, no hubieran liberado a mi hermano mayor”, explica.
Cristal, que ahora lleva un pequeño negocio donde vende cacahuetes en un mercado y a los camiones que van de paso, asegura que el reclutamiento “no es algo bueno para un niño". "Verá sangre, personas decapitadas, verá muerte y todo eso tendrá consecuencias psicológicas en él”, apostilla.
Esclavitud y violencia sexual, matrimonios forzados y problemas de salud son algunas de las violaciones más graves que sufren las niñas en un conflicto armado, según subrayaron Alboan, Amnistía Internacional, Entreculturas, Fundación El Compromiso y Save the Children.
De acuerdo con información de Naciones Unidas, la mayor parte de las niñas reclutadas en la República Democrática del Congo eran sometidas a esclavitud sexual y el 60% de las niñas soldado de Sierra Leona se convirtieron en ‘bush wives’ (esposas de la selva), algo también documentado en Liberia o Angola, mientras que hay casos de matrimonios forzados en Colombia entre menores y comandantes de las FARC.
(SERVIMEDIA)
12 Feb 2015
MGR/LVR/mgr/gja