A través de un comunicado, el Cabildo reseñó que lo importante es que el templo continúe cuidándose y conservando de generación en generación. No obstante, respecto a la titularidad, el Cabildo recordó que la legislación internacional y nacional avala que la titularidad del templo pertenece a la Iglesia católica desde 1236.

“El Ministerio de Hacienda así lo afirmó en un informe publicado el pasado mes de abril en el que quedaba demostrado que la propiedad del monumento pertenece a la Iglesia”, señaló el Cabildo en el comunicado, quien animó al Ejecutivo andaluz a “respetar las leyes”.

Asimismo, el Cabildo aclaró que la inmatriculación del templo no supone un cambio de propiedad, sino una notificación en el Registro de la Propiedad de una propiedad que ya se posee. El Cabildo hizo hincapié que la gestión del templo fue reconocida por la Unesco, que en el mes de junio elevó la categoría del monumento a “bien de valor universal excepcional”.