En declaraciones a Servimedia, el economista explicó que se tendría que retrasar cinco año la edad de jubilación, hasta los 70, y que además para el cálculo de la jubilación debería tenerse en cuenta todo el periodo contributivo.

Barea indicó que la incorporación al mercado de trabajo se ha retrasado por lo general cinco años desde que se fijó como fecha de jubilación los 65, por lo que debería ajustarse en la misma medida.

Además, subrayó que la esperanza de vida ha aumentado, por lo que ahora se trabaja menos años y se cobra la pensión durante más tiempo.

Así, el catedrático apuntó que el Gobierno ha "iniciado el camino", aunque habría que aprovechar la ocasión y dar un impulso más a largo plazo.