En declaraciones a Televisión Española recogidas por Servimedia, el ministro señaló que los servicios de seguridad españoles “están funcionando” para hacer frente a la amenaza islamista, pero añadió que “no hay seguridad absoluta en ninguna sociedad”.

“Hemos de ser capaces de convivir con un cierto nivel de riesgo”, indicó el titular de Interior, quien añadió que lo contrario sería “el Gran Hermano”, en referencia a que un elevado nivel de seguridad llevaría a un control excesivo de la población y se podrían ver afectados derechos fundamentales.

Al mismo tiempo, Fernández Díaz no quiso aportar datos sobre el hecho de que, según se publica este jueves en prensa, uno de los terroristas que atentaron contra ‘Charlie Hebdo’ pasó el fin de año pasado en España. El ministro dijo que se trata de una investigación “especialmente delicada” de la que debe dar cuenta Francia.

“AUTOREGULACIÓN” DE LOS MEDIOS

Por otra parte, el titular de Interior abogó por la “autorregulación” de los medios informativos, en referencia al debate abierto tras el atentado contra ‘Charlie Hebdo’ sobre si publicar o no determinados contenidos, como las viñetas de Mahoma rechazadas por el mundo islámico.

Sostuvo que “ninguna libertad es absoluta”, aunque destacó que “sin libertad de expresión no hay democracia”. Añadió que la respuesta ante publicaciones que no gustan a determinados colectivos “no puede ser el terrorismo”, por lo que abogó por “encontrar el equilibrio adecuado entre la libertad de expresión y la autorregulación”, algo que dijo “es lo más delicado”.

Por otra parte, respecto a las medidas que pueden tomarse para hacer frente al terrorismo yihadista, el ministro dijo que su departamento aboga por penalizar el “consumo habitual” de páginas yihadistas, con el fin de evitar la radicalización y la formación de terroristas.

Según el titular de Interior, esta consulta reiterada de páginas islamistas debería ser penada de la misma forma que en España está tipificado como delito el “consumo habitual de pornografía infantil”.