Aseguró que a día de hoy, las 2.833 farmacias de la región ya dispensan a través de receta electrónica en los 180 municipios de la región, y 4.790 médicos de familia pueden prescribir a través de este sistema en los 263 centros de salud y 160 consultorios locales de la Comunidad de Madrid.

Informó de que desde que comenzó a implantarse la receta electrónica se han beneficiado de esta herramienta 1.297.649 madrileños, que han recogido en la farmacia el medicamento recetado por su médico, sin necesidad de acudir a consulta.

En total, se han dispensado 27.650.076 envases correspondientes a 11.460.762 prescripciones de medicamentos realizadas en los centros de salud.

Destacó que estas cifras ilustran el volumen y grado de aceptación por parte de los usuarios y dijo que gracias a la receta electrónica se disminuyen las consultas destinadas a la prescripción de medicamentos de pacientes crónicos, lo que supone un beneficio tanto para el usuario, que evita acudir al centro de salud sólo para renovar su medicación, como para el médico, que dispone de más tiempo para la prestación asistencial.

Aseguró que “hasta el momento, ha obtenido una excelente acogida por parte de pacientes y profesionales".

Por otra parte, señaló, los farmacéuticos disponen de más tiempo e información para dar un correcto servicio a los pacientes, gracias a la reducción de tareas administrativas relacionadas con la facturación.

Además, añadió, aumenta el papel asistencial del farmacéutico conllevando ventajas para el sistema sanitario ya que permite un mejor control de los medicamentos dispensados y por extensión del gasto farmacéutico.

Explicó que desde el primer momento, la implantación de la receta electrónica en la Comunidad de Madrid se ha realizado en colaboración con el Colegio de Farmacéuticos de la Comunidad de Madrid, con el asesoramiento de las sociedades científicas vinculadas y grupos de expertos en la materia.

El despliegue de la receta electrónica comenzó en 2012 con una experiencia piloto en el Centro de Salud de San Martín de la Vega, para posteriormente extenderlo en Ciempozuelos, Torrelaguna y el Centro de Salud Parque Coimbra (Móstoles).

Durante el año 2013, la receta electrónica se fue implantando en tres fases, comenzando por la zona periurbana y rural (147 municipios), continuando con el área metropolitana y finalmente, en Madrid.